Nuestros viejos

En realidad, ¿qué es ser viejo?
La mayoría de las definiciones subrayan los aspectos deficitarios, negativos: la vulnerabilidad, la propensión a las enfermedades, la progresiva marginación, el acercamiento de la muerte.
El envejecimiento es un hecho obligatorio, pero el considerar la vejes un aspecto negativo es una decisión individual. En otras palabras, cada uno, en decisión personal,establece cuándo "es viejo para...".
Vemos que hay personas que, a veces por simple hastío, otras por convencimiento, que reducirá drásticamente su ritmo vital, que otro cuyas únicas actividades reseñables son dormir, ver la TV, jugar a cartas y quejarse de sus enfermedades ante sus compañeros pensionistas.
No sabemos ni cómo referirnos a estas personas:
• Tercera edad
• personas mayores
• viejos• abuelos
• ancianos...
Cada expresión tiene sus connotaciones, la elección no es superficial.
En el fondo, este problema de denominación manifiesta la incertidumbre que padecemos ante los grupos socialmente menos favorecidos.
¿Dónde los colocamos? ¿Cómo los valoramos? ¿Cómo los tratamos? ¿Qué hacer para que no se auto marginen, para que intervengan en el devenir de la sociedad?
Laimagen que la sociedad trasmite sobre la vejez no resulta para nada atractiva.
En parte, puede explicarse por…
1. la decepción de contemplar que se va perdiendo el sitio, el protagonismo, el poder físico, intelectual, sexual, económico, laboral.
2. La exclusión que la sociedad le da y ellos mismos parecen en muchos casos dispuestos a arrinconarse en lo último de la cola, el de los menos activos.Cambiar la imagen del envejecimiento es un paso indispensable para que las personas que entran en esa fase vital como la sociedad en general modifiquen sus actitudes ante los ancianos.
El mito de la eterna juventud, una trampa sin salida
• Una persona dice: "qué bien, qué joven está", indirectamente está afirmando que lo bueno, en realidad, es ser joven. y que ser viejo no es un valor, sinocasi un defecto.
• Otra frase reveladora: "En mis tiempos", da a entender que su oportunidad, su sitio, ya han pasado: que no hay un hueco relevante para los ancianos, de que no pertenecen a esta época. Así, la persona mayor se siente excluida.
La sociedad, no lo neguemos (¿cuántas películas de TV o cine, anuncios, o pases de modelos tienen por protagonistas principales a personas mayores?)discrimina a los viejos, pero éstos también tienen alguna responsabilidad en tanto que, a veces inconscientemente, participan activamente ("eso es cosa de jóvenes, que decidan ellos") en este proceso de segregación y desconsideración de los mayores.
¿Qué hacer para integrar a los ancianos en la vida cotidiana?
1. Transmitir a la sociedad en su conjunto las necesidades de los viejos, qué piensan, cómose sienten.
2. Todos deberíamos saber que es una situación que nos va a llegar, no podemos seguir mirando a otro lado, y negarnos a nosotros mismos que nos acercamos, o que ya hemos llegado a la Tercera Edad.
3. Mucho dialogo.
Tres principios básicos que debemos tener con nuestros viejitos:
Respeto: a su momento psicofísico, a su ritmo propio, a sus valores y concepciones, a suscomportamientos, a sus deseos y querencias, a su propia organización de la vida.
Atención: La atención al anciano será siempre desde una escucha abierta, positiva y sin juicios de valor ni prejuicios.
Cariño: debemos proporcionárselo a los mayores en grandes dosis, porque en esta edad se valora más que nunca el afecto, la sensibilidad. Con gestos, nuestra mirada, nuestro tono cálido a la hora de dirigirnosa ellos. Y también, mediante la caricia, esa mano que se posa, que presiona, que agarra, ese abrazo que funde la distancia y ese beso que hace sentir que no se está solo y que se es querido y valorado.
V. Dinámica reflexiva – 10 min
Se distribuirán una serie de artículos que utilizan las personas mayores para que los jóvenes asocien cómo ellos pueden ejercer la función de estos artículos en...