Ofelia (poema)

“Ofelia”
Turbia de sombra, el agua del romance
reflejo nuestras trémulas imágenes,
estática de amor, bajo el crepúsculo
en la enferma esmeralda del paisaje…
era el frágil olvido de las floresen el azul silencio de la tarde,
un desfile de inquietas golondrinas
sobre el pálido cielo otoñales…
en un beso muy largo y profundo
nos bebimos las lágrimas del aire,
y fueron nuestras vidascomo un sueño
y los minutos como eternidades…
al despertar del éxtasis, había
una paz funeraria en el paisaje,
estertores de fiebre en nuestras manos
y en nuestras bocas un sabor a sangre…
y enel remanso turbio de tristeza
flotaba la dulzura de la tarde,
enredada y sangrante entre los juncos,
con la inconciencia inmóvil de un cadáver



Francisco Villaespesa.
“Canción”

Cuandohaya muerto, ¡oh dulce amor mío!,
no cantes para mí tristes lamentos;
no pongas junto a mí rosas de nácar,
ni plantes junto a mí cipreses tétricos.
Esté la verde yerba que me cubra
mojada por laslluvias y el rocío,
y si te es grato recordar, recuérdame;
si te es grato olvidar, dame el olvido.
Yo no podré ver las tristes sombras;
ya no podré escuchar caer la lluvia,
ni cómo los divinosruiseñores
continúan trinando sus angustias.
Y, soñando, al través de mi crepúsculo,
que no se alzará ni se podrá,
pueda yo entonces recordar, dichosa
pueda dichosa, entonces olvidar.Cristina Georgina Rosseti.
“Bodas negras”
Oye la historia que contóme un día
el viejo enterrador de la comarca:
__Era un amante a quien por suerte impía
su dulce bien le arrebató la parca.
Todaslas noches iba al cementerio
a visitar la tumba de la hermosa;
la gente murmuraba con misterio:
“es un muerto escapado de la fosa”.
En una noche horrenda hizo pedazos
el mármol de la tumbaabandonada,
cavó la tierra y se llevó en sus brazos
el rígido esqueleto de su amada.
Y allá, en su triste habitación sombría,
De un cirio fúnebre a la llama incierta
sentó a su lado la osamenta...