ol k ase
Según Descartes, el ser humano es un compuesto de sustancia pensante y sustancia extensa. A esta dicotomía las denomina como “res cogitans y res extensa”. Para Descartes la “Res cogitans” (pensamiento), la esencia de esta sustancia, dice Descartés,es el pensamiento y sus propiedades no son sino diferentes modos de pensar: la imaginación, el sentimiento y la voluntad como nos dice en las “Meditaciones Metafísicas”: “una cosa que piensa es una cosa que duda, que entiende, que concibe, que afirma, que niega, que quiere, que no quiere, que imagina también y que siente”. Por el contrario en la “Res extensa” (el cuerpo), la naturaleza y esenciade esta sustancia es la extensión en longitud, anchura y profundidad. El resto de características que podamos atribuir a los cuerpos (como la figura y el movimiento) presuponen la extensión, siendo esta una concepción geométrica o matematizante de la realidad. Para Descartes los animales son pura extensión, no poseen mente alguna.
Descartes propone un método, el cartesiano, que ha de sermatemático y universal, sea cual sea su aplicación o campo del saber a que se refiera a fin de evitar el error, permitiendo aumentar los conocimientos y descubriendo nuevas verdades.
La publicación de las “Meditaciones metafísicas” (1641), con las respuestas de Descartes a las objeciones planteadas por siete de sus críticos, señala el comienzo de la polémica en torno al cartesianismo. A lo largo de lasseis meditaciones de las que consta el libro, el principal objetivo de Descartes es la demostración de Dios y la inmortalidad del alma, mediante razonamientos lógicos; así como definir las bases del conocimiento. Descartes busca encontrar “la verdad” de las cosas a través de la razón y para ello nos dice que hemos de dudar de todas las cosas (duda metódica), especialmente de las materiales,librarnos de los perjuicios y acostumbrar a nuestro espíritu a desligarse de los sentidos.
RESUMEN
Meditación Primera (De las cosas que pueden ponerse en duda)
En la primera meditación Descartes nos dice que desde su niñez había admitido como verdaderas una porción de opiniones falsas. Al cuestionarse esos principios, y no por ligereza sino por fuertes razones, ha de liberarse de antiguosprejuicios. Y para esto no será necesario que demuestre que todos ellos son falsos, bastará para rechazarlos que encuentre, en cada uno, razones para ponerlo en duda. También nos habla de las razones por las cuales podemos dudar en general de todas las cosas y, en particular de las materiales, motivo por el cual nos insta a acostumbrar a nuestro espíritu a desligarse de los sentidos, pues todo lo que setiene por verdadero y seguro lo ha aprendido de ellos y ha podido experimentar que no se puede confiar por completo en ellos pues a veces nos engañan; aunque por otro lado los sentidos nos muestran cosas de las que no se puede razonablemente dudar. Para ello Descartes nos refiere la sensación que se tiene, al soñar, de estar viviendo una realidad; al ser difícil distinguir el sueño de la...
Regístrate para leer el documento completo.