Otra vuelta de tuerca
De forma magistral, el autor consigue que el lector se conviertaen asistente a la reunión y espere con expectación el relato de la historia. La institutriz narra como a la edad de 20 años se trasladó a Londres y aceptó la oferta de un hombre seductor, atractivo,“un perfecto caballero” que la cautivó desde el principio. El hombre era el tutor de sus dos sobrinos huérfanos, un niño de 10 años y una niña de 8. Su situación personal y profesional le impedía poderhacerse cargo de ellos y los había enviado a una residencia en el campo que estaba a cargo de la señora Grose.
La joven llega a la residencia nerviosa por asumir una responsabilidad ante la que no sesentía preparada, pero pronto encontrará encantada con su trabajo y con la compañía de los niños. Sus temores iniciales se disiparán hasta que una serie de sucesos extraños y enigmáticoscomportamientos darán un giro a su situación. Los dos niños aparecen ante sus ojos como inocentes, delicados, dulces, encantadores y sensibles, pero se verán bajo la amenaza de unas apariciones fantasmagóricas quese convierten en influencias maléficas.
La institutriz se tomará su trabajo como una cruzada personal para proteger y defender a las dos criaturas más desamparadas y adorables del mundo. Pero eldesarrollo de los acontecimientos y la revelación de sucesos oscuros relacionados con el pasado de los niños y de su antecesora en el cargo, provocarán que el lector dude en todo momento sobre la...
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