Piedras verdes

A pesar de que he leído algún que otro libro del reconocidísimo historiador español, Salvador de Madariaga, no había caído en mis manos esta joya que es el corazón de piedra verde. Escrito hace másde 57 años, este libro instruye mucho al lector, ya que relata con sumo detalle los símbolos más representativos de la cultura azteca, y provee además ilustraciones de diversa índole sobre esta ricacultura. La narración nunca resulta tediosa, ya que entreteje, por un lado, la historia de Xuchitl, princesa tezcucana, hija del sabio rey Nezahualpilli, por el otro la de Don Alonso Manrique, hijo deun acaudalado español. Relata además una historia de fantasmas, de magia, y de un talismán de amor que es un corazón de chalchivitl (jade o la piedra verde). Me ha gustado sobre manera, como puedeverse, los significados de las palabras que se traducen de lenguas como el otomí y el nahuatl, así como la antigua ortografía para algunas de ellas como: mejico (ahora México), tezcuco (texcoco), Xuchitl(Xochitl, que para mi asombro era un nombre masculino), y tantas otras que amplian la cultura y el conocimiento del lector. Lo maravilloso de esta historia es el amor que surge entre Xuchitl y Alonso,que contrasta tremendamente con el propio hecho de su encuentro, la confrontación, por llamarlo de alguna manera, de estas dos culturas tan diferentes. Tenemos por un lado, la extensa variedad decultos, creencias y tradiciones de la cultura azteca; por el otro el proposito español de evangelizar a una nación, de erradicar completamente sus creencias y de cierto modo, obligarles a cambiar susmuchos dioses, por uno solo. Es aquí donde surge la gran paradoja que perdura hasta nuestros días. El autor transmite la idea de que el mayor propósito de la conquista se basó en la religión y nos da aentender que los antiguos ritos aztecas son una aberración y la completa antítesis del sacrificio que representa la crucifixión para redimir los pecados de los hombres. En este punto, es donde surge...