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Captura Metálica a 30 mil tapatíos

Las 4:00 de la tarde y en san lunes consideramos buena hora para retirarnos del domicilio del hotel y partir por la avenida López Mateos, tomar la vía rápida a Vallarta para posterior mente incorporarnos a la calle Lázaro Cárdenas de la ciudad capital mundial del mariachi que se prolonga directamente hacia el Estadio 3 de Marzo, donde 5 horas más tardeestaríamos viviendo una de las más grandes experiencias rukeras.
Daniel “el triki” estaba un poco frenético, histérico porque minutos antes se le había dificultado echar andar el auto al parecer tenia algunos problemas, y el bólido denominado “la caribola” que nos acarreará eternamente “se pone sus moños” cuando más la necesitamos, pero no le dimos la mayor importancia, dada nuestra rapidez por llegarcuanto antes al lugar del gran acontecimiento de rock puro.
Como pocas veces he visto en la zona metropolitana de Guadalajara el tráfico estaba muy fluido, era tan fluido como la sangre que brota de una herida, y muy pronto estuvimos rondando la zona de Av. Patria y Pablo Neruda buscando guardar “la caribola” porque eso si, en la calle no se puede quedar solita porque llegan los amantes de loajeno y la pueden enamorar, eso siempre dice “el triki”. Ya nuestro amigo “Oswaldo” -quien junto con el Bulma, su hermano (del Bulma) y otro compinche de ellos, Víctor, creo, ya residían dentro del estadio unas horas antes que nosotros como a eso de las 2 de la tarde cuando abrieron las puertas “seguramente a barrer”- nos había avisado que la cuota en los estacionamientos aledaños al estadio eran de50 pesos por todo el evento, pero al llegar al primer estacionamiento que preguntamos ya costaba 150 pesos, ¡¡Ni madres cabrón!! –Dijimos-, así que buscamos un lugar para estacionarnos un poco más lejos, serenos, escuchando la rola “Enter Sandman” los dos puesto que era aún un poco temprano y poseíamos nuestro sagrado lugar afianzado “gracias al fabuloso Tiketmaster”.
Después de un paseocultural por lugares que yo no concia y observar cómo se alejaba el estadio tres de Marzo de nuestra mirada, cuando repentinamente el triki con su frenética maestría al volante tomó un retorno de manera indebida, porque observó un lugar adonis, desolado y sin aparente viene, viene, cosa que me pareció rara, si al triki no le gusta dejar la caribola en la calle. Y hay descubrí que le importa más elconcierto que otra cosa, así que luego de certificarnos que estaba aprovechable y no había problema, decidió dejar el auto ahí, después de poner su bastón de seguridad al volante, retirar la caratula del estéreo y dejarla debajo del asiento, activar el cortacorriente, coloca un par de tenedores oxidados sobre las ventanillas de las puertas delanteras y después de todo le da su infaltable bendición, y medice muy confiado ¡no se la vayan a robar!
Después del extenso ritual de estacionar la caribola, ya todo seria sencillo, por lo que con gusto nos disponíamos a recorrer las seis cuadras panteoneras que nos distanciaban para llegar al estadio de los futuros tecolotes de segunda.
Perezosamente a las 5:30 de la tarde poca banda había llegado al lugar. Ya estaban los puestos ambulantes. "Esa negraestá chida". "se ve bien la que tiene la guitarra roja". "Esa chaqueta parece de gasero". Buscábamos la que valiera la pena como para empezar a sacar los primeros 50 pesos del sobre que me había dado mi mujer para el toquín. Se leía en él: Concierto de Guadalajara.
Después de una serie de regateos con una chava buena onda de ojos rojos y corazón contento y apunto de comprar una playera negra conletras en rojo, me grita el triki a la voz de “pérate cabrón, adentro están vendiendo las originales", después de una corta pero nutrida fila nos dieron una pequeña revisadita “pasamos por las armas” como vulgarmente se dice. Ingresamos al recinto monumental conocido como "Cancha A3". Con los papelitos en la mano que el Señor de la computadora mágica te proporciona porque son boletos de...