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CONCLUSIONES
Los niños, los imbéciles y los locos no tienen uso de razón, pueden ser personificados por guardianes o cuidadores; pero durante ese tiempo no pueden ser autores de una acción hecha por ellos, hasta que (cuando hayan recobrado la razón) puedan juzgar razonable dicho acto.

Falsos dioses. Un ídolo o mera ficción de la mente puede ser personificado, como lo fueron los dioses de lospaganos, los cuales, por conducto de los funcionarios instituidos por el Estado, eran personificados y tenían posesiones y otros bienes y derechos que los hombres dedicaban y consagraban a ellos, de tiempo en tiempo.

El verdadero Dios puede ser personificado, primero por Moisés, quien gobernó a los israelitas (los cuales eran no ya no su pueblo, sino el pueblo de Dios), segundo por nuestrodivino Salvador Jesucristo, que vino a juzgar a los judíos y por tercero mediante el Espíritu Santo, o confortador, que hablaba o actuaba por los Apóstoles.

Una multitud de hombres se convierte en una persona cuando está representada por un hombre o una persona, de tal modo que está puede actuar con el consentimiento de cada uno de los que integran esa multitud en particular.

El fin del Estadoes, particularmente la seguridad, que viene a ser el cuidado de su propia conservación y, por añadidura el logro de una vida armónica.

Los hombres no observaban otras leyes que las leyes de honor, que consistían en abstenerse de crueldad.

Si pudiéramos imaginar una gran multitud de individuos, concordes en la observancia de la justicia y de las otras leyes de la naturaleza, pero sin un podercomún para mantenerlos a raya, podríamos suponer igualmente que todo el género humano hiciera lo mismo, entonces no existiría, no sería preciso que existiera un gobierno civil o Estado, en absoluto, porque la paz existiría sin sujeción alguna.

Según Aristóteles:

Los hombres están en continua pugna de honores y dignidad.
El goce del hombre consiste en compararse a sí mismo con los demáshombres.
El hombre usa la razón.
Las criaturas (abejas, hormigas) no ven, ni piensan, no pueden distinguir entre la justicia y el daño.

Estado en latín CIVITAS. Esta es la generación de aquel gran Leviatán, o más bien, de aquel dios mortal, al cual debemos, bajo el Dios inmortal, nuestra paz y defensa. Porque en virtud de esta autoridad que se le confiere por cada hombre particular en elEstado, posee y utiliza tanto poder y fortaleza, que por el terror que inspira es capaz de conformar las voluntades de todos ellos para la paz, en su propio país, y para la mutua ayuda contra sus enemigos, en el extranjero.

Es Estado ha sido instituido cuando una multitud de hombres convienen y pactan cada uno con cada uno, que a un cierto hombre o asamblea de hombres se le otorgará, por mayoría,el derecho de representar a la persona de todos (es decir, de ser su representante).

Los súbditos no pueden cambiar de forma de gobierno. En primer lugar, puesto que pactan, debe comprenderse que no están obligados por un pacto anterior a alguna cosa que contradiga la presente. En consecuencia, quienes acaban de instituir un Estado y quedan, por ello, obligados por el pacto, a considerar comopropias las acciones y juicios de uno, no pueden legalmente hacer un pacto nuevo entre sí para obedecer a cualquier otro, en una cosa cualquiera, sin su permiso.

El poder soberano no puede ser enajenado. En segundo lugar como el derecho de representar la persona de todos se otorga a quien todos constituyen en soberano, solamente por pacto de uno a otro, y no del soberano en cada uno de ellos, nopueden existir quebrantamiento de pacto por parte del soberano, y en consecuencia ninguno de sus súbditos, fundándose en una infracción, puede ser liberado de su sumisión. Quien es elegido soberano no efectúe pacto alguno, por anticipado, con sus súbditos, es manifiesto, porque o bien deben hacerlo con la multitud entera, como parte del pacto, o debe hacer un pacto singular con cada persona....