Reflexión

“El problema de las clasificaciones es que su orden caduca” Georges Perec
Clasificar es ordenar el caos, está claro que ésta desazón de orden no es carente de sentido. Es decir, al ordenar nuestromundo nos aquietamos frente al desorden y el azar. Las clasificaciones achican nuestro campo de la duda; nos protegen de la ignorancia.
Al clasificar, tenemos en cuenta nuestros nombres, nuestralengua; lo cual es inevitable, ya que lo relacionamos con cosas que ya hemos visto y escuchado.También, inconscientemente, antes de clasificar ya hemos decidido donde irá cada una de las cosas queetiquetamos.
En clase llevamos a cabo un ejercicio donde nos asignaban una palabra y debíamos buscar una cierta cantidad de palabras que relacionemos con la misma. Luego, nos proponían que lasdistribuyamos en distintos grupos, según sus características. Al finalizar, nos explicaron que el fin de este ejercicio no era tener una perfecta clasificación, ya que ésta no existe; mas bien, era comprenderque si hay una clasificación pero cada uno construye una diferente.
Como dice Baudrillard en El sistema de los objetos, “Existen casi tantos criterios de clasificación como objetos mismos” . A su vez,los objetos y sus funciones están unidos con lo que lo rodea. Nosotros le damos la “funcionalidad” a los mismos. En diseño, esto se revela de muchos modos, ya sea en la indumentaria, una gráfica ouna silla. Además, estos aspectos funcionales son utilizados con el fin de clasificar.
El orden caduca por que cada cultura le da un significado disímil a los objetos, quiere decir que cada culturatiende a seleccionar lo esencial para ellos y a descartar lo que para otras culturas sería trascendental.
Entonces, ¿como podemos comunicar algo si no todas las culturas tienen las mismas prioridades?Foucault hace mención a que “La historia de la locura sería la historia de lo Otro –de lo que, para una cultura, es a la vez interior y extraño y debe, por ello, excluirse (para conjurar un peligro...