Retiro

RETIRO ESPIRITUAL OCTUBRE DE 2010
VALOR DEL MES
AYUDA
LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS
Introducción
Ayuda es una acción humana tendiente a resolver las necesidades de una persona o grupo social; no es el simple beneficio material con que se benefician una colectividad, sino el compromiso que tenemos como hombres y mujeres de Iglesia de servir a nuestros hermanos y hermanas sin distinción deninguna clase, atendiéndolos en cualquier tipo de necesidad que tenga sea material o espiritual, ya que solamente no es atenderlo con algo material sino igualmente con un consejo o un servicio en un momento de crisis sentimental o de cualquier índole.
En cualquier momento nosotros debemos estar dispuesto a ayudar al prójimo o semejante porque es nuestro compromiso como cristiano bautizado,brindando desde nuestra condición humana bienes y servicios que garanticen un mejor bienestar en especial los más necesitados.
La comunión de los santos
1.- Tema este de la Comunión de los santos que me cautiva, que a todos los cristianos nos ha de llenar de esperanza, ilusión, deseo de trabajar por el Reino de Dios. Para eso dio su vida Jesucristo, «para congregar en unidad a todos los hijos deDios, que están dispersos» (Jn 11,52). La Iglesia no es un número de ovejas que sigue cada una su camino (Is. 53,6), sino un rebaño congregado por el Buen Pastor y por los pastores que le representan.
2.- La Iglesia es un Cuerpo, un Pueblo, una Comunión, en la que «la asamblea visible y la comunidad espiritual no deben ser consideradas como dos cosas distintas» (LG 8 a). Por tanto, no se puede sercristiano «por libre», sin vinculación habitual con los hermanos y con los pastores; aunque de hecho, por circunstancias especiales, muchos hayan de actuar solos, pero siempre se sentirán unidos a la Iglesia de Cristo, la unión con Jesús de todos cuantos creemos, esperamos, amamos a Él, en Él al mundo entero.
3.- Para ser miembro de Cristo, miembro de su Cuerpo, que es la Iglesia, por supuestoson necesarios la fe y el bautismo. Y no olvidemos también la necesidad de t incorporarnos de verdad a la Iglesia; aceptar la totalidad de los dogmas definidos y los medios de salvación establecidos en ella, y estar unidos con Cristo, el cual la rige mediante el Sumo Pontífice y los Obispos, por los vínculos de la profesión de fe, de los sacramentos, del gobierno y de la comunión eclesiástica. (Verla Lumen Gentiom 14 b). Buscar siempre la unidad, aun en medio de ciertas contradicciones que vemos entre la verdad, y la manera de vivir esa verdad, por parte de los dirigentes eclesiales, pues a veces constatamos en ellos ciertas actitudes no ejemplares; ante esto debemos pedir fuerza de fe para superar estas situaciones humanas no agradables para no desanimarnos nosotros mismos.
4.- QuisoDios que en su Iglesia hubiera un ministerio de la representación de Cristo - id, evangelizad, haced esto en memoria mía, apacentad mis ovejas, perdonad los pecados - En este sentido, el sacerdocio ministerial no es sino el signo visible del amor invisible y de la solicitud constante del Buen Pastor por los hombres. Así pues, «el sacerdote hace sacramentalmente presente a Cristo, Salvador de todo elhombre, entre los hermanos, y no sólo en su vida personal, sino también social». Por eso hemos de esforzarnos por actuar en unión de nuestros pastores, aunque a veces hayamos de obrar en solitario, pero siempre unidos. Nunca desvincularnos.
5.- La herejía y el cisma rompen la Comunión eclesial. «La herejía de suyo se opone a la fe, mientras que el cisma se opone a la unidad eclesial de lacaridad» (Suma Teológica de Santo Tomás de Aquino – Tomo II, 39,1 al 3 m). La herejía suele conducir al cisma, y el cisma lleva a la herejía. Y es que la fe genuina ha de guardarse en el Templo de la caridad eclesial. Hay alejados por ignorancia o por pereza, pero el alejamiento consciente y voluntario se parece mucho a la actitud del cismático. Sirva esta consideración para llegar a comprender nuestra...