SÍNTESIS ARGUMENTATIVA SOBRE EL QUIJOTE I

LA FALTA DE PRUDENCIA Y LA VEJEZ DEL HIDALGO DON QUIJOTE DE LA MANCHA EN RELACIÓN CON EL CONCEPTO DE NECEDAD DE ERASMO DE ROTTERDAN

Con éstos iba ensartando otros disparates,
todo al modo de los que sus libros le habían enseñado,
imitando en cuanto podía su lenguaje; y,
con esto caminaba tan despacio, y el sol entraba
tan aprisa y con tanto ardor, que fuera bastante
a derretirle los sesossi alguno tuviera.

(CERVANTES, 1981 pág. 28)

EL ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, como se ha visto en la obra del escritor español Miguel de Cervantes Saavedra, es un personaje auténtico que juega con sus creencias, interiorizándolas para sí con una intencionalidad poco probable de querer confundir o de intervenir en la realidad de los que lo ven o se lo topan en “el caminoreal”(deducción que se toma desde el interior de la obra sobre el camino de la realeza), pero este caso en particular abre la oportunidad de relacionar al personaje cervantino con algunos contenidos de la obra del humanista Neerlandés Erasmo de Rotterdam El elogio de la locura en los que se analiza al personaje desde su vejez y su prudencia inmersos en la necedad y en la empresa forjada a partir de suslecturas como caballero andante; sin descartar algunos aportes de la obra teatral de Alejandro Casona, La sirena varada con el fin de evidenciar brevemente atisbos sobre la locura del Quijote en la que juega ampliamente un papel decisivo desde el inicio de la obra cervantina.
Cuando un hombre o una mujer se acercan al fin último del ciclo vital, su comportamiento se ve modificado por una serie deactividades que parecen retroceder a su juventud. Podría pensarse que es una hibridación entre nostalgia y deseo lo que posibilita a estos sujetos a emprender un viaje hacia su infancia, o, a intentar suplir aquellas situaciones que en un momento dado de su “juventud anterior” dejaron a medias o nunca fue satisfecho.
Asumir al Quijote como un hombre viejo que desea retroceder a su infancia y lohace jugando a ser caballero andante, asume un papel que no está tan alejado de la veracidad, un papel de necio, en la que juega la posibilidad que emite un juicio de Rotterdan sobre los hombres y mujeres que se ven en los límites de su ciclo vital. Los viejos y viejas desean la juventud e intentan vivirla, se tornan necios al no reconocerse como viejos, o a no permitirse acabar su ciclo de talmanera y es por esa misma motivación que (apresuradamente se afirmaría) nace el Quijote de la Mancha, un hombre que realiza las hazañas que el viejo Alonso Quijano no pudo realizar.
Frisaba la edad de nuestro Hidalgo con los cincuenta años; era de complexión recia, seco de carnes, enjuto el rostro, gran madrugador y amigo de la casa […] Se daba a leer libros de caballerías con tanta afición ygusto, que olvidó casi de todo punto el oficio de la caza, y aun la administración de su haciendo […] y así del poco dormir y del mucho leer se le secó el cerebro, de manera que vino a perder el juicio […] y al cabo se vino a llamar “Don Quijote” (CERVANTES, 1981 págs. 23, 24, 25).
El personaje del Quijote es el niño en el cuerpo de un viejo que comienza a vivir cuando se encuentra con que su cuerpoes despojado por el tiempo. Afirma Rotterdam sobre los viejos que “las mismas razones que debían convencerle para no desear conservar la existencia, son, sin embargo, las que e incitan a querer vivir más; ¡tanto aborrecen experimentar cualquier tristeza!” (1970 pág. 83). Y se deduce de cierta forma, que esa incitación proveniente del exterior, como afirma Américo Castro en su texto sobre “Elpensamiento de Cervantes y otros estudios cervantinos”, permite la construcción de realidad metaforizada regocijada en las causales circunstancias literarias de las que Quijana dispuso (libros de caballería) para hacer vivir al Quijote.
La locura o la necedad del Quijote se entrelazan, además de la vejez, con la virtud de carácter griego, la prudencia. Erasmo dice que la prudencia “consiste en el...