San Agustín

TEMA 2: San Agustín, La Ciudad de Dios, XI, caps. 26-27[1].

Al igual que su vida, el Pensamiento de S. Agustín no es ni sistemático ni ordenado sino que es un conjunto de reflexiones personales en torno a los temas propios de la época que le tocó vivir. Es por eso que, todos esos temas están interrelacionados en su Filosofía, de tal modo que se les puede considerar como mutuamenteinterdependientes. Entre esos temas hay uno que destaca sobre los demás: la búsqueda de la Felicidad por parte del alma humana. A este respecto, S. Agustín piensa que la Felicidad sólo se encuentra en la sabiduría, que se alcanza mediante la posesión de la verdad. Como, según él, la verdad es Dios, también es Él el punto de referencia respecto al cual se debe mover el ser humano. La naturaleza imperfecta delser humano le impulsa a buscar la verdad y, consecuentemente, la Felicidad, pero, a juicio de S. Agustín, sólo el Creador puede colmar esa necesidad humana.
Así, el Pensamiento de S. Agustín plantea la cuestión siguiente: ¿Qué relaciones hay entre Dios y el ser humano? Sus soluciones a este problema de las relaciones entre el deseo de verdad del ser humano y Dios (la Verdad) como única garantíade su Felicidad no son estrictamente novedosas. Las ideas agustinianas son una respuesta a los problemas que también planteó la Cultura clásica, es decir, la Filosofía griega y romana (aunque éstas lo hicieran desde la perspectiva ética, sin ningún matiz religioso). Con sus respuestas, S. Agustín pretendía configurar una genuina Cultura cristiana —una paideia— de la que deriva la solución a dos delos asuntos más importantes de su Filosofía: La relación entre Dios y el hombre individual y la presencia de Dios en el alma humana.
Este tema se articula en cuatro puntos: en primer lugar, se trata la solución al problema de las relaciones entre Razón y Fe de acuerdo con la perspectiva de San Agustín; en segundo término, se ve su refutación de las posiciones de los escépticos o académicos, queson los que creen que no se puede conseguir el conocimiento de la verdad —asunto que aparece en el texto—; en tercer lugar, se estudia el problema del error y el pecado en relación con la Inteligencia y la Voluntad humanas; en último término, se ve la solución epistemológica y ética en torno a la que se articulan las relaciones entre Dios y el ser humano en la Filosofía de San Agustín.

1. Razóny Fe en San Agustín
La Filosofía como disciplina y la Razón como facultad de conocimiento que la produce son propias del ser humano[2]. Por su parte, la Fe es una donación que Dios hace al ser humano y que se expresa en la práctica de la Religión. Para San Agustín, ambas (Razón y Fe, Filosofía y Religión) son necesarias para alcanzar la Felicidad. Por eso, sostiene la tesis de que hay unaestrecha colaboración entre Razón y Fe en el camino del descubrimiento de la verdad. Entre Razón y Fe existe, a juicio del filósofo de Hipona, complementariedad más que delimitación clara o diferencia manifiesta. Su principio básico a este respecto se expresa en la fórmula Crede ut intelligas, intellige ut credas ("Cree para entender, entiende para creer"), con lo que se mantiene una totalinterdependencia entre ambos ámbitos: Razón y Fe.
La formación maniquea de San Agustín en su juventud[3] le hizo tomar conciencia de la amargura que produce el uso de la sola razón, pues ésta lleva siempre al escepticismo[4], debido a la falta de respuestas definitivas que ofrece. El poder de la Razón es limitado y el filósofo que intenta sobrepasar sus límites cae necesariamente en la perplejidad o elabsurdo. Por eso, la Filosofía sola no puede llegar a conseguir la Felicidad que produce el conocimiento de la verdad, por lo que su capacidad ha de ser complementada por la Fe, sin perder su carácter estrictamente racional. Esa misma educación filosófica de San Agustín le animó a intentar mostrar que es posible entender racionalmente las verdades reveladas en las Escrituras. Así procuró hacer de la...