Segunda carta-relación de hernán cortés al emperador carlos v.
Segura de la Frontera 30 de octubre de 1520
Enviada a su sacra majestad del emperador nuestro señor, por el ca-
pitán general de la Nueva España, llamado don Fernando Cortés, en
la cual hace relación de las tierras y provincias sin cuento que ha
descubierto nuevamente en el Yucatán del año de diez y nueve a esta
parte, yha sometido a la corona real de Su Majestad. En especial
hace relación de una grandísima provincia muy rica, llamada Culúa,
en la cual hay muy grandes ciudades y de maravillosos edificios y
de grandes tratos 1 y riquezas, entre las cuales hay una más maravi-
llosa y rica que todas, llamada Tenustitlan, que está, por maravi-
lloso arte, edificada sobre una grande laguna; de la cual ciudad yprovincia es rey un grandísimo señor llamado Mutezuma; donde le acae-
cieron al capitán y a los españoles espantosas cosas de oír. Cuenta
largamente del grandísimo señorío del dicho Mutezuma, y de sus ri-
tos y ceremonias y de cómo se sirven.
Muy alto y poderoso y muy católico príncipe, invictísimo emperador
y señor nuestro:
En una nao que de esta Nueva España de vuestra sacra majestad des-paché a diez y seis días de julio del año de quinientos y diez y
nueve, envié a vuestra Alteza muy larga y particular relación de las
cosas hasta aquella sazón, después que yo a ella vine, en ella suce-
didas. La cual relación llevaron Alonso Hernández Portocarrero y
Francisco de Montejo, procuradores de la Rica Villa de la Vera Cruz,
que yo en nombre de vuestra alteza fundé. Y después acá,por no ha-
ber oportunidad, así por falta de navíos y estar yo ocupado en la
conquista y pacificación de esta tierra, como por no haber sabido
de la dicha nao y procuradores, no he tornado a relatar a vuestra
majestad lo que después se ha hecho; de que Dios sabe la pena que
he tenido. Porque he deseado que vuestra alteza supiese las cosas
de esta tierra, que son tantas y tales que, como ya enla otra re-
lación escribí, se puede intitular de nuevo emperador de ella, y
con título y no menos mérito que el de Alemaña, que por la gracia
de Dios vuestra sacra majestad posee. Y porque querer de todas las
cosas de estas partes y nuevos reinos de vuestra alteza decir todas
las particularidades y cosas que en ellas hay y decir se debían, se-
ría casi proceder a infinito.
2. [Segundacarta]
Que a ocho leguas de esta ciudad de Churultecal están dos sierras
muy altas y muy maravillosas, porque en fin de agosto tienen tanta
nieve que otra cosa de lo alto de ellas si no la nieve, se parece.
Y de la una que es la más alta sale muchas veces, así de día como
de noche, tan grande bulto de humo como una gran casa, y sube encima
de la sierra hasta las nubes, tan derecho como unavira2, que, según
parece, es tanta la fuerza con que sale que aunque arriba en la sie-
rra andaba siempre muy recio viento, no lo puede torcer. Y porque yo
siempre he deseado de todas las cosas de esta tierra poder hacer a
vuestra alteza muy particular relación, quise de ésta, que me pare-
ció algo maravillosa, saber el secreto, y envié diez de mis com-
pañeros, tales cuales para semejantenegocio eran necesarios, y
con algunos naturales de la tierra que los guiasen, y les encomendé
mucho procurasen de subir la dicha sierra y saber el secreto de a-
quel humo, de dónde y cómo salía. Los cuales fueron y trabajaron lo
que fué posible para la subir, y jamás pudieron, a causa de la mu-
cha nieve que en la sierra hay y de muchos torbellinos que de la
ceniza que de allí sale andan porla sierra, y también porque no
pudieron sufrir la gran frialdad que arriba hacía, pero llegaron
muy cerca de lo alto, y tanto que estando arriba comenzó a salir
aquel humo, y dicen que salía con tanto ímpetu y ruido que parecía
que toda la sierra se caía abajo, y así se bajaron y trajeron mucha
nieve y carámbanos para que los viésemos, porque nos parecía cosa
muy nueva en estas partes a...
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