Supervision

DESARROLLO DE HABILIDADES SUPERVISORIAS

TRATA A LOS DEMÁS COMO A TI TE GUSTA QUE TE TRATEN

“Y así, haced vosotros con los demás hombres todo lo que deseáis que hagan ellos con vosotros; porque esta es la suma de la Ley y de los profetas”
Evangelio según San Mateo VII, 12
Versión de Félix Torres Amat

“Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así tambiénhaced vosotros con ellos; porque esto es la Ley y los profetas”
Versión de Casiodoro de Reina, Revisada

Si queremos resumir la filosofía del cristianismo en pocas palabras, no creo que exista otra descripción más sucinta que este versículo del Sermón de la Montaña, pronunciado por Jesús de Nazaret a “una gran muchedumbre de gentes de galilea, y......”
La idea no era nueva, años antes yaexistía un proverbio chino, creo que de Confucio que decía: “No hagas a los demás lo que no te gusta que te hagan a ti”.
Pero el cambio de negativo a positivo introduce un enfoque filosófico totalmente diferente, siendo en mi opinión lo más importante, que en el caso de Jesús la acción se hace necesaria para cumplir el precepto, mientras que en el caso del proverbio chino, no hacer nada es la opción másfactible.
Por cierto he observado que en Venezuela, aun después de haber dictado una charla explicando esto, la gran mayoría dice: “No le hagas a los demás lo que no te gusta que te hagan”.
Desde 1.982, cada vez que he facilitado talleres, dictado cursos o pronunciado charlas sobre supervisión, gerencia o liderazgo, he insistido que mi gestión de enseñanza no sería necesaria, si yo tuviese elpoder mágico de insuflar en cada uno de los participantes que:
“Trate a los demás como le gusta que lo traten. Que se comunique con los demás como le gusta que se comuniquen con él o ella. Que le dé a los demás lo que le gusta que le den. Que sea con los demás como le gusta que sean con él o ella. Que se comporte con los demás como le gusta que se porten con él o ella. Que le reconozca a los demássus méritos, como le gusta que se los reconozcan a él o ella”.
Les digo que esta es la regla mágica para convertirse instantáneamente en un buen gerente, en un buen padre, en un excelente vecino o en un apreciado líder. Utilizando esta máxima cristiana nuestras relaciones interpersonales serán más cordiales, productivas y engrandecedoras.
Quiero, en este momento aclarar que no estoy hablando dereligión. No le estoy pidiendo a nadie que se convierta en la Madre Teresa de Calcuta. No le estoy diciendo que vaya por el mundo haciendo caridad, recogiendo loquitos por la calle o quitándose la ropa para vestir al harapiento.
Si usted decide hacer esto, magnifico, el mundo tendrá una persona santa más y por lo tanto será un lugar mejor donde vivir.
De lo que estoy hablando yo es de gerencia,específicamente del área de la gerencia que tiene que ver con dirigir a los demás para lograr los objetivos planteados. A lo que me refiero es a nuestras relaciones diarias con la familia, con los compañeros, con nuestros jefes y con nuestros supervisados. Al intercambio cotidiano con los dependientes de tiendas, con el panadero, con nuestros amigos y hasta con el funcionario público o con elpolicía.
Es muy común que mucha gente piense que este precepto es su regla de convivencia, pero basta con observar el comportamiento de las abnegadas madres con sus hijos para poner esto en duda.
Cuando estamos en un centro comercial como el CCCT, vemos a señoras de unos 170cm de estatura con sus hijos pequeños arrastrados debido a sus largas zancadas.
Están demasiado apuradas para detenerse en lavidriera de los juguetes, pero el aparador de la zapatería si es algo que amerita dedicarle tiempo. ¿Están tratando a sus hijos, como les gustaría que las trataran a ellas?
Si en lugar del CCCT, bajamos un poco por la escalera social y nos vamos al mercado de la redoma de Petare, allí veremos a los niños cargando una bolsa pesadísima para su mamá, mientras esta lo apura dándole un cogotazo,...