TEATROS

EL CABALLO DE MADERA
Habla Camila
Odiseo sabía que todo el esfuerzo hasta el momento no era suficiente: para obtener la victoria sobre Troya era necesario una estrategia.
-Odiseo dice Agamenón te pido que reúnas a los jefes aqueos.
Cuando estuvieron todos juntos, expuso su plan.
-Agamenón dice ¿Tu que dices hermano?
Menelao responde yo únicamente se pelear, nadie esmejor que Odiseo ¿Y tú?
-Néstor dice si la idea de Odiseo fracasa, perderemos a nuestros mejores guerreros. Pero si estas en lo cierto, no habrá forma de que Troya se salve.
Agamenón se pone de pie.
Hagámoslo entonces llevaremos el plan de Odiseo adelante.
-Durante todo el día siguiente los aqueos, desarmaron la empalizada que protegía el campamento.
Odiseo dio la orden y usaronla misma madera para construir un gigantesco caballo.
-Al anochecer, Agamenón mando levantar el campamento.
Se ocultaron en un estuario cercano, a la espera del momento oportuno.
Esa mañana, los habitantes de Troya se despertaron en medio de gritos de entusiasmo.
¡Los aqueos se han ido! Exclamaban los guardias desde las torres… ¡las naves ya no están en la playa!
¿Qué esesto? Pregunto el rey
-¡Por Zeus, señor, te lo pido, no me mates!
-¿Y porque han hecho esta figura tan grandes?
La construyeron como una ofrenda para congraciarse con Atenea.
-¿Y a qué se debe que estés atado?
-El adivino también anuncio que hacía falta un sacrificio humano. Tuve la desgracia de ser designado por la suerte, desfavorable y cruel. ¡Perdóname la vida, oh rey!-¡Cállate ahora! –Exclamó Primiano-
¡Desátelo y vigílenlo! - ordeno.
-¡Debemos llevar esta ofrenda a la ciudad! –surgieron varios-. ¡Así podremos honrar debidamente a la diosa que nos ha salvado! , pero imprevistamente se alzó una voz en contra; el sacerdote de Apolo.
-¡Deténgase, conciudadanos! –Grito-. ¡No podemos confiar en los griegos, ni siquiera cuando nos hacen unregalo! ¿Cómo sabemos que no se trata de una trampa?
-¡Antifante, tiembro! –Exclamo, llamando a sus hijos-. ¡Ayúdenme, antes de que sea tarde! ¡Prendámosle fuego ahora mismo a este caballo maldito!
Los fejes troyanos contemplaron el prodigio lleno de espanto, sin atinar a reaccionar.
Durante buena parte del día, decenas de hombres se dedicaron a construir una gran plataforma detroncos, con ocho ruedas macizas.
Era demasiada alta.
-¡Tenemos que entrarla como sea!-dijo Deifodo a su padre-. Déjame que yo lo solucione con algunos hombres elegidos por mí.
Busco un lugar conveniente en las murallas, y mando que abriera una brecha del ancho de la figura.
-¡Ese animal funesto trae el fuego a la ciudad! ¡Vuelva a sacarlo antes de que sea tarde!-advirtióCasandra.
-¡Ay, Troya!-murmuro la princesa.
Estas perdida, y nada de lo que yo diga podrá evitar tu ruina.
Una vez que el caballo estuvo en el centro de la plaza, comenzó una gran celebración. Se regocijaban cantando, danzando y bebiendo por el fin de los interminables años de asedio.
-Pregunto Hécuba, ¿Ha terminado todo, esposo mío?
-Ha terminado todamujer.
-¿Y que hemos conseguido después de tanta lucha sangrienta?
El silencio del rey fue la única respuesta.
Horas más tarde, la ciudad entera dormía, entonces muy lentamente, se abrió la pequeña puerta disimulada en el costado del cabello.

En completo silencio, Neoptólemo y Menelao se acercaron al guardia que custodiaba la brecha por donde había hecho pasar elcaballo.
El guardián dormitaba.
Hicieron una señal con una antorcha, para que pudieran verla desde la flota que, como estaba convenido, durante la noche había vuelto a aproximarse a la playa.
Unos se dirigían a la brecha de la muralla; otros; a las puertas que ya había abierto Odiseo y sus hombres.
Mientras tanto, Neoptólemo mataba a los troyanos que, echados en el...