“Todas las horas que pasé junto a dalloway”

Expresión oral y escrita. Departamento de Castellano - Curso y división:
Alumno: Mariano Maeso
Título: “Todas las horas que pasé junto a Dalloway”

La primera impresión que quisiera rescatar encuanto al tratamiento que hace la novela Las horas de Michael Cunningham, de la relación del lector con la lectura o de la necesidad humana de relatos, proviene (curiosamente) de un artículo escritopor el autor, para el Corriere Della sera, en el 2003. En el mismo, el autor comenta su propia experiencia, de cómo Virginia Woolf llegó a su vida junto a una amiga llamada Mrs. Dalloway, después deun simple hecho cotidiano, de una charla con una compañera de Universidad, y de su posterior interés, seguido de una visita a la biblioteca y de un definitivo encuentro significativo con un libro quecambiaría todo. Lo interesante es que al terminar de leer el libro, se dio cuenta de que no había entendido nada de la historia, pero que, de alguna manera, el lenguaje prevalecía y embellecía elsentido del texto, generándose un diálogo entre lector y novela. El joven Michael supo escuchar bien, y más adelante (ya como escritor) escribiría una novela en la que están inmersas todas susexpectativas: de lo que es la lectura, de lo que representa y del placer de narrar historias. En Las horas se repite la historia, pero esta vez el rol del lector lo cumple la Señora Brown, que encuentra en Mrs.Dalloway una forma de escape a su vida doméstica y que, como una Madame Bovary moderna, se dejará seducir por la singularidad de las palabras, al leerse a sí misma. También está Virginia e incluso la“señora Dalloway”, que es en realidad Clarissa. Pero me interesa en este caso la señora Brown. Sobre todo en el modo de ver reflejados su mundo, sus problemas y añoranzas, en otro mundo que representa,quizás, otros problemas y añoranzas no muy distintos; la identificación, por lo tanto, está ligada a la necesidad de relatos, de otras “vidas” posibles, como una idea de continuidad, para una...