Tranporte masivo
En el afán de no vermeahogado por las penurias que las obras mencionadas me (nos) propinan cotidianamente, debo incurrir en algunas observaciones que seguramente incomodarán a más de un funcionario competente. Valga la penadejar expreso que no pongo en tela de juicio la desinteresada gestión de directivos y contratistas, lo cual sería una audacia que yo mismo no me perdonaría.
La primera anotación tiene que ver, comoes obvio, con la dilatada y perseverante prolongación de las labores de construcción que como se sabe vienen causando evidentes traumatismos a la movilidad de la ciudad de por si deteriorada por laausencia de vías alternas que descongestionen nuestra ya legendaria Avenida Pedro de Heredia (a propósito, me pregunto si luego de culminado el proyecto, esta vía seguirá rindiendo honor a nuestrofundador o por el contrario su denominación se trocará por el nombre de uno de tantos modernos próceres ciudadanos). Pues bien, ya en otra oportunidad había comentado que las obras del Transmetro deBarranquilla, con una extensión similar, quizás menor, se encuentra en funcionamiento hace ya varios meses. Yo espero con el mismo estoicismo que anuncie arriba como una virtud central de los cartageneros,que antes del próximo mundial de futbol podamos discurrir apacibles pero raudos por la nueva avenida que ahora llamaremos troncal.
La segunda de mis inquietudes tiene que ver con la eficacia de...
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