Una Clase Suspendida De Historia Que Cambió La Historia

María Elena González.


Una clase de historia suspendida que cambió la historia.
(El mayo francés)


Todos hemos sido alguna vez sobresaltados por un estrepitoso trueno, ignorantes de que había amenazas de tormenta. Experiencias similares a estas de la atmósfera suelen ocurrir en la sociedad, y aunque algunos historiadores están poco dispuestos a admitir que haya sorpresas en lahistoria, hasta los más perspicaces han sido a veces sorprendidos por algún trueno social o político, imprevisto.

En 1968, ocurrieron no uno sino varios de estos fenómenos, que sacudieron al mundo de manera inesperada. A la distancia de treinta años, esos acontecimientos se observan con ópticas que intentan un balance con resultados diferentes. Hay quienes los ven como hechos magnificados, sinmayor trascendencia perdurable; están los que hablan de 1968 como el año que cambió al mundo; algunos lo observan a la luz de los cambios que han ocurrido desde entonces, descubriendo en ellos nuevos significados; otros entienden que lo que aparentemente moría a fines de los sesenta, simplemente renovó sus fuerzas vitales; sin olvidar que para quienes eran jóvenes en esa época, y de un modo u otropartícipes de esos sucesos, la memoria de los mismos es la nostálgica expresión de unos tiempos en que las utopías parecían posibles.

Para los nacidos después de ese año, los nombres que aluden a 1968, "la primavera de Praga", "el comunismo con rostro humano", "el mayo francés", "la matanza de Tlatelolco", parecen contener la magia de un tiempo de grandes, pero nebulosos, sucesos. Son comoparte de un código que les resulta extraño. Los jóvenes de hoy que tienen curiosidad por conocer los hechos protagonizados por los jóvenes de entonces, intuyen que la clave para descifrarlo reside en la atmósfera de inconformismo que se percibe en las fotografías de las manifestaciones estudiantiles, de la imagen del Che Guevara, convertido en símbolo universal de la rebelión frente al sistema, delas protestas masivas, de los graffitt irreverentes o desafiantes que proclamaban "Prohibido prohibir", "La imaginación al poder", "Tomemos el cielo por asalto", "Seamos realistas, pidamos lo imposible", "Cualquier visión del mundo que no sea grotesca es falsa", "Paren el mundo que me quiero bajar". Sin embargo esas imágenes no revelan las raíces poco claras del fenómeno, ni tampoco respondenporqué se debilitó después de ese gran despliegue.

El mundo vivía entonces una de las etapas de calentamiento de la guerra fría. Vietnam era el escenario de la guerra de Estados Unidos contra el comunismo, fuertes tensiones se observaban en el bloque socialista en Europa y Asia, y en América Latina, las amenazas de difusión de la revolución cubana daban pretexto adicional a la violencia de la guerrainsurgencia-contrainsurgencia. Todo esto amén de las manifestaciones de la contracultura, la desobediencia civil, los festivales rock, y hasta gestos como el saludo del Black Power, con el puño en alto, de los atletas negros estadounidenses en las Olimpíadas de ese año en México, que adquirieron plena significación a la luz de la rebelión juvenil de 1968.

Europa atravesaba una prolongada épocade prosperidad, la primera del siglo XX, que hubiera desautorizado pronósticos de serios problemas sociales inmediatos. Una expresión de "los treinta gloriosos" años que corrían desde la postguerra, fue el aumento de la matrícula universitaria que pasó en Francia de 200.000 a 500.000 estudiantes, entre 1958 y 1968. Precisamente, ese simple dato cuantitativo encierra algunas claves de la explosiónde mayo del 68. Otras, que agregaron al caldo de cultivo, tenían que ver con la cultura autoritaria de la que el presidente Charles De Gaulle era una famosa y superlativa expresión y con la política económica del gobierno francés que buscaba frenar la inflación y el descenso del crecimiento económico, mediante férreas disposiciones fiscales, un fuerte proteccionismo, y la reducción de los...