ver el cielo acompañado

Antes de comenzar a hablar sobre algún tipo de anécdota que quisiera contarles, debería admitir que quizá desvaríe un poco al momento de contar lo que quiera contar, alterar una fecha, un nombre, unlugar o hasta un beso.

Todos dicen que la memoria guarda nuestros mejores recuerdos, pero ¿Qué sucede con esas personas que a diario viven en un mal recuerdo? Yo tuve suerte, de no ser parte deuno de ellos, recuerdo algo más lejano de lo que está el sol pero tan cerca que te quema al saberlo. Al salir del colegio, al dejar a mis compañeros express de séptimo y octavo, en realidad no teníamucha esperanza de lograr pelear en contra de mis propios tormentos, había llegado a esa pequeña localidad justamente para calmar lo que sea que mes estuviera haciendo mal. Me sentía excelente, pero poralguna razón no lograba transmitirlo ni mucho menos demostrarlo. Muchas veces me hablaron de lo que vendría, que sería grande, que llegaría lejos, que mis sueños ahora comenzarían a volverserealidad. Pero sin intención de desilusionarlos, amigo lector, apestaba llegar a un lugar donde eras como los demás, pero más apestaba saber que no eras parte de los demás, estabas recaído en un grupo de 3personas. Un inofensivo y motivado compañero que disfrutaba de la música rock y bueno, otro igual de simpático. Tenía la esperanza de que al ser mi primer año las cosas se verían bien, digo, siempre laprueba es un poco más sencilla, pero basta de rodeos y entremos en lo que importa…. ¿Qué importa?

Era el primer día, la primera prueba, la primera vez que mis pies tendrían la obligación de caminarcorrectamente para andar encorvado y escondido el resto del año, cabeza baja, como dice mi madre. Lo primero que recuerdo fue entrar lentamente, y fijar mi destino hacia un biombo con nombres desalas y alumnos, estaba nervioso, por primera vez en mi vida escolar y por petición propia mama no me acompañaba a la nueva era, la media. Sera de torpe, o de nervioso pero conseguir dar con una...