Vivencial Historias De Trabajo

El negocio está lleno a más no poder, la mitad del personal está ocupado, aun no pueden recibirme. Veo como la persona que nos hará la visita corre de un lado a otro buscando productos. Es casi la hora de almuerzo y las vecinas atrasadas llegan de amontones a comprar lo necesario para cocinar.
En esta carnicería de San Bernardo se encuentra de todo; Abarrotes, artículos de aseo y limpieza,verduras, bebidas, pan, maquinas tragamonedas, pero por lo que es más conocida y famosa. Es por las tradicionales prietas, longanizas y arrollados que fabrican sus dueños.
Al poco rato de estar ahí Nelson González uno de los dueños se percata de mi presencia y se encoje de hombros y lanza un breve pero gracioso comentario. “A las vecinas hay que atenderlas a todas” en un claro doble sentido. Peroya está. Pronto podremos pasar a descubrir como se fabrican las tan famosas prietas, longanizas y arrollados.
Antes de entrar de lleno a la sala de fabricación ubicada en la parte trasera de la carnicería, me proveen de los implementos necesarios para entrar. Delantal blanco, pechera de vinilo para que los jugos escurran y no sean absorbidos por la ropa, botas de goma de un perfecto blanco,guantes quirúrgicos, malla para el pelo y mascarilla. Ya estoy listo. Es hora de ir a conocer el proceso desde adentro.
Son casi las dos de la tarde y los maestros tienen todo preparado para comenzar con la fabricación. A cargo de todos los procesos se encuentra Carlos, el otro dueño y hermano de Nelson. Quienes aseguran trabajar con la más exquisita receta familiar.
Al entrar ya con ladisposición de poner todo el esfuerzo posible en el trabajo junto a ellos, me sorprende gratamente cuando me cuentan que uno de los secretos para darle ese sabor “mágico” como lo llaman ellos. Es la música., pero no cualquier música. Las rancheras y corridos mexicanos son lo que se escucha. Así que es hora de poner manos a la obra y apretar play.
“Adolorido, adolorido, adolorido del corazón, por unaingrata por una ingrata que me ha jugado una cruel traición. Yo a ti no te puedo olvidar, tu me has abandonado porque eres informal”. Es lo primero que sale de la radio, con un fuerte volumen, las cuatro personas al son de la música comienzan rápidamente a juntar los ingredientes en grandes fondos de acero inoxidable.
Los aromas van mezclándose. Entre la carne de cerdo, la pimienta y el comino,el vino blanco el ají y el secreto familiar ya se juntan en los fondos, mientras son revueltos con gran fuerza por uno de los ayudantes. Pese al fuerte olor que sale, no es para nada desagradable y la imaginación lleva más allá y antes de que pudieran estar listas ya las veo humeando en la parrilla esperando por los comensales para ser devoradas, el olor que se desprende da hambre, y ya estamoscada vez más cerca de la hora de almuerzo.
La música sigue fuerte en la radio, el tiempo avanza de prisa, cada uno desempeñando distintas labores, me siento un inútil, hasta el momento no he podido ayudar en nada. Pero tomo la palabra y la iniciativa y le pregunto a Cristian uno de los maestros en que puedo ayudarle. Me mira de arriba abajo creyendo que no podré realizar algún encargo. Mepregunta si me la puedo con alguna de las labores. –Por supuesto que sí respondo con ganas-
Lo primero que me toca hacer es seguir revolviendo la masa en la que se transforma la carne mezclada con los demás ingredientes, es un trabajo cansador pero no genera inconveniente alguno.
La sala es espaciosa. Consta de dos grandes mesones en donde quedan los productos para ser agregados uno a uno a losrecipientes metálicos. Todo está cubierto por cerámica, no hay ningún lugar que no cuente con ella. Al comienzo todo era bastante frío, pero con el pasar de los minutos y estando en movimiento fui entrando en calor.
Seguía revolviendo para que quedara todo con la misma consistencia y el mismo sabor, el trabajo no resultó difícil, ya cuando me cambiaron de labor pude apreciar nuevos procesos,...