P L Ay K Le I Ni An O , P L Ay I Ng W I Nni C Otti An O

Escuela Inglesa de Psicoanálisis Segundo cuatrimestre de 2011 – turno noche

P L AY K LE I NI AN O , P L AY I NG W I NNI C OTTI AN O
“Y me encierro otra vez y no puedo salir” “Es que a veces no me le animo al niño que llevo dentro”. ‘MAMBEADO’ DE ONDA VAGA

En el prólogo de Realidad y juego, Pontalis cuenta las dificultades de la tarea de rearmar los escritos de Winnicott en otro idioma.Cuando describe la doble diferencia entre game y play, y play y playing, afirma -respecto a Winnicott- que “si el psicoanálisis no fuera más que un game, no le hubiera interesado nunca; y si pudiera reducirse a un play, entonces él hubiera sido kleiniano” (Pontalis, 1971: III). El prologuista sigue su texto explicando aquella diferencia que obstaculiza la tarea de traducción, y no vuelve a mencionarla que separa a Winnicot de Melanie Klein. Antes de intentar descifrar aquella frase en la que pareciera residir la diferencia, voy a trabajar algunos puntos de comparación. Lo primero que salta a la vista del lector es que para Melanie Klein el niño nace con posición subjetiva mientras que Winnicott considera que parte de un estado de indiferenciación entre yo y no-yo, pero diferenciándose deFreud a través de la introducción de los conceptos de objeto y fenómeno transicionales en los que designa una zona intermedia entre erotismo oral y la verdadera relación de objeto. Como corolario, emerge otra diferencia: para ella el paso es, de un yo poco desarrollado que se relaciona con objetos parciales, al de un yo que se va integrando dialécticamente y se relaciona con objetos totales; mientrasque para él ese paso se da –desde la indiferenciación - a través de la relación con un objeto transicional, que no es ni parcial ni total, y que se da entre la actividad creadora primaria y la proyección de lo que se ha introyectado, entre el desconocimiento primario de la deuda y el reconocimiento de esta. Hay una zona intermedia entre lo subjetivo y lo que se percibe en forma objetiva. Hay unaprimera posesión no-yo que complica la experiencia autoerótica, que no es absolutamente subjetiva ni algo considerado externo para el niño como por ejemplo, introducir una frazada en la boca cuando succiona el pulgar; estas experiencias van acompañadas de pensamientos o fantasías que constituyen el fenómeno transicional (Winnicott, 1971). Por otra parte, según Klein la formación de símbolos estáasociada a la posibilidad de que el niño tenga fantasías sádicas respecto a sus relaciones edípicas. Por eso ella considera, por ejemplo, que el desarrollo ulterior en Dick fue perturbado porque no pudo vivir en fantasías la relación sádica con el cuerpo de la madre. Se produjo el freno a la formación de símbolos porque la fase genital había comenzado prematuramente, consiguiendo inhibir eldesarrollo del yo, dado que la temprana relación con el objeto no podía ser enfrentada con la realidad. El temor al castigo que recibiría cuando penetrara el cuerpo de la madre frenó la formación de símbolos (Klein, 1930). Mientras que para Winnicott, el simbolismo es empleado cuando el niño ya distingue entre fantasía/objetos internos/creatividad primaria, por un lado, y los hechos/objetosexternos/percepción, por otro. La raíz de esa distinción debe pensarse en el tiempo, como un viaje desde lo subjetivo puro hasta la objetividad, y el objeto transicional es lo que se ve de ese viaje. De todas formas la tarea de la aceptación de la realidad nunca queda terminada y hay siempre una tensión al vincular la realidad interna con la exterior, y es la zona intermedia de experiencia la que alivia dichatensión; por eso es necesaria para iniciar la relación del niño con el mundo (Winnicott, 1971). Es inevitable considerar las diferencias que se plantean en ambas teorías, ya que pareciera que Winnicott amplía el rango de objetos posibles que permiten la formación de símbolos. No por esto desestima la relación con la madre, al contrario, es considerada de vital importancia, siendo necesario que...