30 minutes

30 minutos.
Minuto “0”
Echando un vistazo al mar, he dado rienda suelta a ésta historia. La perfecta inspiración para desarticular mis pensamientos y de paso ceder a una cadena de sentimientos que sin esperarlo comenzaron a surgir. Es 17 Diciembre, un día después de mi cumpleaños y me es difícil describir las intangibles y no menos profundas cosas que viví, irán fluyendo de a pocos.Extrañamente solo, a las 23:55 del 15 Diciembre, a vísperas de comenzar una celebración poco obvia, en una calle deshabitada extasiada en sus paredes y esquinas, llegarían los abrazos y comenzaría la noche mientras la mente y el cuerpo estaban dispuestos; unos cuantos tragos de tanqueray, música, luces, alucinaciones, todo dado para pasar una noche diferente en la que el cuerpo va muriendo lentamente pararenacer al amanecer. Fue en ese momento que las miradas comenzaron a surgir de la oscuridad, su espalda postrada en frente de mí, su cuello desnudo, su pelo desarreglado, su color de piel, todo me impulso a lanzar uno que otro soplido para hablarle.
- ¡Mucho gusto, G.D!
Fueron las primeras palabras que le escuché decir luego de girarse y posar su mirada en la mía, sus ojos envueltos en laprofundidad de un éxtasis, flipando y disfrutando del momento, me fueron llevando a disfrutar de su compañía y su leve modo de volverme secuaz de sus labios dieron inicio a los 30 minutos.

Minuto “1”
-Aguanta-. Seguido a ello, -“30 minutos”-.
Sin importar el contexto de sus palabras, al momento me hallaba platicando a la salida del bar con su mejor amigo, escuchando complicidades de años deamistad, su signo zodiacal; cáncer, matrimonio, estimulas, prohibiciones, enamoramientos, llegada de seres de luz, feng shui, sueños cumplidos, una promesa hecha y olvidada, todo eso para que después estuviese sentado en un taxi luego de haber aceptado su propuesta de ir a casa, el cual quedaría deshabitado esa misma tarde.
Una chimenea, marihuana, besos cada vez más prolongados, la alfombra del lugar,el comienzo del amanecer y el deseo, fueron dejando los cuerpos desnudos permitiendo recorrer centímetros de piel y desencadenando intentos de homicidio cada vez más elaborados, el primero de ellos “una correa en el cuello” para después enterarme de sus verdaderas intenciones. Un sleeping y colchoneta acompañaron la mañana, croissant de almendras, jugo de naranja, palitos de queso y huevosrevueltos, elaboraron uno de los desayunos más apreciados, la felicidad se iba quedando pequeña en ese momento, mientras tanto el sol y la brisa hacían de las suyas, yo solo me dedicaba a disfrutar de su compañía y del momento.
La ducha fue testigo de un segundo intento de homicidio, “Un jabón clavado en el pecho”.

Minuto “5”

“Vengase conmigo a Cartagena”.
Llegó su hora de despedirse y salir deun lugar que descrito por él, le brindó verdadero calor de hogar, y ni decirlo, así lo sentí en esos “5 minutos” que pude apreciar este espacio. Sentí su nostalgia y no pensé en más que un abrazo, es lo más sincero que pude ofrecerle; el dejar a su papá, un hombre que al parecer le enseñó mucho, le produjo notoria tristeza, y a pesar de que no lo demostraba, en medio de su seriedad siempre estuvedispuesto a mitigar su aflicción y brindarle una grata compañía, ¿por qué?, ni responder, sólo él me produjo hacerlo.
Fue reservar un par de tiquetes y ya me encontraba camino a casa para hacer maletas. Su mirada me reflejaba tal seguridad que me impedía pensar negativamente sobre mis acciones en ese momento y estando en el aeropuerto, un café y su presencia creaban la tarde de ese 16 Diciembreque sin esperarlo me dio varias sorpresas, y me daba una firme convicción de que lo que vendría no sólo podía proporcionarme alegrías inmediatas, servía para darme fuerzas de seguir luchando por mis propósitos y firmes deseos que sentía se estaban ahogando en mi mente.

Minuto “6”

En Cartagena los momentos comenzaron a matizarse con encantos cada vez más indescifrables, un hotel me permitió...