Abstract y Lectura analítica: Frankenstein Educador - Pág. 13/61
Páginas: 4 (760 palabras)
Publicado: 10 de junio de 2013
¿Construcciones frankenstianas o la educación de sujetos libres?
Inquietante perspectiva sobre la educación y el rol de los educadores
Meirieu presenta una interesante propuesta para repensar laeducación, reflejando un problema al que se enfrenta: “construir un sujeto sumando conocimientos”, con la intención de brindarle libertad. El autor refleja esta problemática a través de analogías conobras narrativas y mitológicas (Frankenstein, Pigmalión, Pinocho, y otros), y recupera conceptos de la teoría del Buen Salvaje de Rousseau. Meirieu sostiene que la “fabricación” de un hombre, como enel relato de Shelley, no difiere de la tarea de la pedagogía tradicional.
El autor manifiesta que todo educador enfrenta un sujeto a quien debe transmitir lo que considera necesario para sudesarrollo; aunque el educando se resiste a que se quiera “hacer algo” de él. Por otra parte, los sujetos no pueden darse a sí mismos identidad, porque ésta se construye en el mundo, a través de los adultosque los educan. El ser humano necesita ser educado para vivir en el mundo, pero esta educación no lo determina.
Meirieu compara el Pigmalión con una contradicción frecuente en educación: Eleducador no se conforma con un producto pasivo, busca un educando libre; que, a su vez, agradezca la labor realizada. En la analogía con Pinocho, señala la manera en que, a menudo, buscando el bien, loseducadores dejan de lado los intereses del educando. Según el autor, Pigmalión y Pinocho son materiales que el hombre utiliza con el objetivo de fabricar lo humano.
Preguntas suscitadas por lalectura
¿Cómo podemos enfrentar la problemática de la educación para escapar a la paradoja de “hacer niños”?
¿Es posible ser educador sin imitar al Dr. Frankenstein?
¿Podemos “formar” sin“fabricar”?
¿Es posible enseñar la libertad, si buscamos “construir” un ser que se asemeje a nosotros, que nos lo deba todo, pero que al mismo tiempo no esté obligado a nada?
¿Cómo es posible enfrentar...
Inquietante perspectiva sobre la educación y el rol de los educadores
Meirieu presenta una interesante propuesta para repensar laeducación, reflejando un problema al que se enfrenta: “construir un sujeto sumando conocimientos”, con la intención de brindarle libertad. El autor refleja esta problemática a través de analogías conobras narrativas y mitológicas (Frankenstein, Pigmalión, Pinocho, y otros), y recupera conceptos de la teoría del Buen Salvaje de Rousseau. Meirieu sostiene que la “fabricación” de un hombre, como enel relato de Shelley, no difiere de la tarea de la pedagogía tradicional.
El autor manifiesta que todo educador enfrenta un sujeto a quien debe transmitir lo que considera necesario para sudesarrollo; aunque el educando se resiste a que se quiera “hacer algo” de él. Por otra parte, los sujetos no pueden darse a sí mismos identidad, porque ésta se construye en el mundo, a través de los adultosque los educan. El ser humano necesita ser educado para vivir en el mundo, pero esta educación no lo determina.
Meirieu compara el Pigmalión con una contradicción frecuente en educación: Eleducador no se conforma con un producto pasivo, busca un educando libre; que, a su vez, agradezca la labor realizada. En la analogía con Pinocho, señala la manera en que, a menudo, buscando el bien, loseducadores dejan de lado los intereses del educando. Según el autor, Pigmalión y Pinocho son materiales que el hombre utiliza con el objetivo de fabricar lo humano.
Preguntas suscitadas por lalectura
¿Cómo podemos enfrentar la problemática de la educación para escapar a la paradoja de “hacer niños”?
¿Es posible ser educador sin imitar al Dr. Frankenstein?
¿Podemos “formar” sin“fabricar”?
¿Es posible enseñar la libertad, si buscamos “construir” un ser que se asemeje a nosotros, que nos lo deba todo, pero que al mismo tiempo no esté obligado a nada?
¿Cómo es posible enfrentar...
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