Ansiedad

Siempre recuerdo cuando niño y luego adolescente, como calmaba mi angustia, llenándome la cabeza con las noticias del día, el fútbol y mi equipo favorito, o la política, -más allá de una auténtica preocupación por la realidad de mi país-, o cualquier otro tema que me permitiera escaparme del dolor. Todas esas cosas constituían mi anestesia, pues conectarme con el desasosiego interior me eraterriblemente doloroso. Hoy, cuando veo a mucha gente "engancharse" obsesivamente con alguna "historia" hasta hacerla parte esencial de su vida, la puedo comprender.

Las personas se "anestesian" de maneras muy variadas. El cigarrillo, la comida, la televisión, el consumismo compulsivo, el trabajar sin parar, las drogas, el alcohol y otras muchas formas de escaparse de uno mismo. Todas no son más quealternativas o salidas, para desconectarse de los sentimientos más profundos, que resultan sumamente amenazadores.

Estas anestesias de alguna manera permiten no sufrir. Y digo de alguna manera, porque realmente se sufre. Se sufre de no poder ser uno mismo, de no poder crecer, de no lograr trascender lo cotidiano, de no expresar toda la riqueza y potencial que toda persona guarda en su interior.En definitiva, si nos anestesiamos nos privamos de vivir como realmente podríamos vivir. Corremos tras pequeños placeres que no son nada al lado de la inmensa satisfacción que puede darnos vivir desde nuestro verdadero ser. Pero para ello, necesitamos animarnos a conectarnos con esa angustia, con esos sentimientos que siempre nos acompañaron y a los que siempre le huimos. Llega un momento que lavida nos acorrala para que cambiemos, ya sea a través de una enfermedad o una crisis en cualquier aspecto de la vida.
Ante todo existe un hecho evidente: la mayoría de la gente no ha recibido de sus padres todo lo que necesitaba. Seguramente por una causa o por otra nos han faltado caricias, contención, mucho apoyo para enfrentar la vida que nos tocaba vivir, y supongo que tu puedes completar lalista con muchas otras necesidades no cubiertas.
Pero no olvidemos, que tampoco nuestros Padres recibieron de sus propios Padres la aceptación y el amor incondicional que necesitaban.

Todos deseábamos y necesitábamos la total y plena aceptación como personas, con nuestras virtudes y defectos; y fundamentalmente, con lo diferente que podíamos llegar a ser.

Con esa base no tan sólida, con esas raícespoco fuertes, empezamos a transitar la vida arrastrando ese dolor, el dolor de no haber recibido todo lo que necesitábamos y de no ser aceptados incondicionalmente. ¿Cuantas veces buscamos llenar esos vacíos con nuestra pareja, o un amigo? Probablemente esto haya generado nuevos conflictos.

Por eso tenemos que trabajar directamente con nuestras raíces, con Papá y Mamá. Allí está el origen demuchos de nuestros dolores. Pero debe quedar muy en claro que en este proceso terapéutico no existen chivos expiatorios ni culpables. Trabajamos con nuestros padres para comprendernos y comprenderlos, para encontrar las soluciones a nuestras carencias.

Muchas veces proyectamos nuestras carencias afectivas a la persona más cercana que tenemos: la pareja. Le exigimos que nos brinde todo aquello que nonos pudieron dar nuestros padres. Simultáneamente descargamos en ella, lo que inconscientemente quisiéramos hacer con ellos. Y esto generalmente es recíproco. Muchas peleas y divorcios tienen su origen en ese pasado doloroso y carente de amor filial.

Por eso es tan importante y esencial el trabajo interior para nuestro bienestar, y el de las personas que comparten nuestra vida.

Capítulo 11.¿Hacia dónde miras?

¿Te has fijado que es imposible llorar si miras hacia arriba? ¿Te has fijado alguna vez en que las personas deprimidas miran hacia abajo? Nuestros ojos son un reflejo del tipo de pensamientos que hacemos. Para encontrar un pensamiento determinado, nuestro cerebro lo busca espacialmente.

Si haces que un niño que esté llorando mire hacia arriba, inmediatamente dejará de llorar....