Análisis bicentenario de la revolución de mayo
Páginas: 23 (5525 palabras)
Publicado: 4 de septiembre de 2012
Análisis: Bicentenario de la Revolución de Mayo
Introducción:
El presente trabajo se propone analizar los festejos oficiales del Bicentenario de la Revolución de Mayo con la intención de desentrañar la densidad compleja que atañe al desarrollo de la conmemoración. Las celebraciones del pasado 25 de mayo se entienden un fenómeno social que trasciende el mero acontecimiento aislado. Lahistoria deja de ser una colección de hechos muertos”[1] y la reflexión se avoca a la construcción de relaciones que problematicen el objeto.
El trabajo interpretativo hace hincapié en tres dimensiones de análisis: procesos de constitución de la identidad, de producción y transmisión del conocimiento, y de apropiación cultural; perspectivas de análisis interrelacionadas.
El análisis procede apartir de una base documental hemerográfica. La selección del material se definió a partir de la inclusión de los diarios de mayor presencia a nivel nacional en 2010: diarios Clarín y La Nación. Se añaden, a su vez, los cuatro diarios provinciales con mayor índice de ventas según el Instituto Verificador de Circulaciones (IVC): La Voz del Interior (Córdoba), La Gaceta (Tucumán), La Capital(Rosario), El Día (La Plata). La incorporación de estos cuatro últimos, obedece al deseo de adoptar un enfoque más amplio que arroje líneas de lectura novedosas más allá de una mirada local y centralizada.
Desarrollo:
La Presidenta de la Nación inauguró oficialmente los festejos patrios[2]. La ordenación del evento se coordinó íntegramente desde el Gobierno central con un presupuesto de 40millones de pesos[3] para la organización del ‘Paseo del Bicentenario’. Desplegados sobre una superficie de 1.200 m², los festejos que se sucedieron entre el 21 y el 25 de mayo, ofrecieron a los concurrentes un circuito de 25 stands que tematizaban la “idiosincrasia” de cada provincia del país; un paseo gastronómico con 72 puestos de comidas típicas autóctonas e internacionales; un espaciodedicado a Madres y Abuelas de Plaza de Mayo; homenajes al rock nacional con figuras como Fito Páez, León Gieco y Litto Nebbia; un “Desfile Militar” con la participación del Regimiento de Patricios y de Granaderos a Caballo; un “Desfile Federal”; un “Recital de música latinoamericana”; el “Desfile de la Integración” con la participación de 4.000 personas en representación de distintas comunidades delmundo; espectáculos de tango y folclore local y latinoamericano; un desfile de transportes antiguos; pantallas gigantes transmitiendo el partido de despedida de la Selección Argentina; un show en homenaje al cine argentino; el “Desfile de Mayo” organizado por el director del grupo artístico Fuerza Bruta; postas con charlas y foros de debate sobre Ciencia y Tecnología, Juventud y Educación, MedioAmbiente, Cultura, Derechos Humanos y Producción.
El inmenso despliegue escenográfico siguió el modelo de una gran feria; con un total de 140 shows reunió a 1.200 artistas en cuatro escenarios durante cinco días[4]. Allí, el gran público disfrutó de espectáculos de rock nacional, tango, folklore; cebó mate; fotografió las formaciones militares; cantó junto a Litto Nebbia, Soledad o Víctor Heredialas “canciones que sabemos todos”[5]; alentó, gritó goles; se emocionó con Fito; otra vez, celulares para registrar las llamas jujeñas, las proyecciones 3D sobre el teatro Colón, las carrozas desfilando, la bandera más larga del mundo, la reina de la Vendimia, dinosaurios mecánicos, la tigresa Acuña, Mafalda, Clemente, Inodoro Pereyra, aviones Hércules, obras de León Ferrari o la estatua deMercedes Sosa; buscó sus ancestros en los registros de inmigrantes llegados al Puerto de Buenos Aires en 1880; comió fatay árabe, salchichas con chukrut austriacas, locro, pastelitos; escuchó ritmos indígenas y africanos; agitó banderines, entonó una y otra vez el Himno Nacional; compró gorritos y escarapelas; vio películas de la Revolución de Mayo, reconoció las caras de los próceres nacionales,...
Introducción:
El presente trabajo se propone analizar los festejos oficiales del Bicentenario de la Revolución de Mayo con la intención de desentrañar la densidad compleja que atañe al desarrollo de la conmemoración. Las celebraciones del pasado 25 de mayo se entienden un fenómeno social que trasciende el mero acontecimiento aislado. Lahistoria deja de ser una colección de hechos muertos”[1] y la reflexión se avoca a la construcción de relaciones que problematicen el objeto.
El trabajo interpretativo hace hincapié en tres dimensiones de análisis: procesos de constitución de la identidad, de producción y transmisión del conocimiento, y de apropiación cultural; perspectivas de análisis interrelacionadas.
El análisis procede apartir de una base documental hemerográfica. La selección del material se definió a partir de la inclusión de los diarios de mayor presencia a nivel nacional en 2010: diarios Clarín y La Nación. Se añaden, a su vez, los cuatro diarios provinciales con mayor índice de ventas según el Instituto Verificador de Circulaciones (IVC): La Voz del Interior (Córdoba), La Gaceta (Tucumán), La Capital(Rosario), El Día (La Plata). La incorporación de estos cuatro últimos, obedece al deseo de adoptar un enfoque más amplio que arroje líneas de lectura novedosas más allá de una mirada local y centralizada.
Desarrollo:
La Presidenta de la Nación inauguró oficialmente los festejos patrios[2]. La ordenación del evento se coordinó íntegramente desde el Gobierno central con un presupuesto de 40millones de pesos[3] para la organización del ‘Paseo del Bicentenario’. Desplegados sobre una superficie de 1.200 m², los festejos que se sucedieron entre el 21 y el 25 de mayo, ofrecieron a los concurrentes un circuito de 25 stands que tematizaban la “idiosincrasia” de cada provincia del país; un paseo gastronómico con 72 puestos de comidas típicas autóctonas e internacionales; un espaciodedicado a Madres y Abuelas de Plaza de Mayo; homenajes al rock nacional con figuras como Fito Páez, León Gieco y Litto Nebbia; un “Desfile Militar” con la participación del Regimiento de Patricios y de Granaderos a Caballo; un “Desfile Federal”; un “Recital de música latinoamericana”; el “Desfile de la Integración” con la participación de 4.000 personas en representación de distintas comunidades delmundo; espectáculos de tango y folclore local y latinoamericano; un desfile de transportes antiguos; pantallas gigantes transmitiendo el partido de despedida de la Selección Argentina; un show en homenaje al cine argentino; el “Desfile de Mayo” organizado por el director del grupo artístico Fuerza Bruta; postas con charlas y foros de debate sobre Ciencia y Tecnología, Juventud y Educación, MedioAmbiente, Cultura, Derechos Humanos y Producción.
El inmenso despliegue escenográfico siguió el modelo de una gran feria; con un total de 140 shows reunió a 1.200 artistas en cuatro escenarios durante cinco días[4]. Allí, el gran público disfrutó de espectáculos de rock nacional, tango, folklore; cebó mate; fotografió las formaciones militares; cantó junto a Litto Nebbia, Soledad o Víctor Heredialas “canciones que sabemos todos”[5]; alentó, gritó goles; se emocionó con Fito; otra vez, celulares para registrar las llamas jujeñas, las proyecciones 3D sobre el teatro Colón, las carrozas desfilando, la bandera más larga del mundo, la reina de la Vendimia, dinosaurios mecánicos, la tigresa Acuña, Mafalda, Clemente, Inodoro Pereyra, aviones Hércules, obras de León Ferrari o la estatua deMercedes Sosa; buscó sus ancestros en los registros de inmigrantes llegados al Puerto de Buenos Aires en 1880; comió fatay árabe, salchichas con chukrut austriacas, locro, pastelitos; escuchó ritmos indígenas y africanos; agitó banderines, entonó una y otra vez el Himno Nacional; compró gorritos y escarapelas; vio películas de la Revolución de Mayo, reconoció las caras de los próceres nacionales,...
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