Cien años de soledad, voragine, popol buh, maría

Este informe intentará demostrar como la violencia a través de los tiempos fue condicionando la vida de los hombres, y como la literatura en su proceder fue utilizada como medio de protesta de las comunidades cercada por el fenómeno de la violencia.
La violencia (del latín violentia) es un procedimiento para conseguir un fin con actos fuera del modo natural. Es la presión psíquica o abuso dela fuerza a través del maltrato, presión, sufrimiento, manipulación ejercida contra una persona o grupo de personas con el propósito de obtener fines contra la voluntad de las víctimas.
Debería estar ya desterrado en una sociedad civilizada, pero sigue actuando en la sociedad como si fuera el único medio por el cual unos pocos hacen oír su voz, mientras que los más débiles, han de seguiraguantando. La violencia, ya sea natural o humana, ha permanecido en la vida del planeta. Nunca, en toda su existencia como especie, el ser humano ha podido soslayarla o dominarla. Todavía más: hijos de ella y como buenos hijos la practican y la usan cuando la creen necesario.
A pesar de esta descarnada realidad, el hombre siempre pensó en la paz y creó la cultura para enfrentar a las violentasfuerzas de la naturaleza como asimismo su propia violencia. Trabajó y trabaja denodadamente para conseguir la tranquilidad y el descanso que le permita gozar plenamente de la vida. En la realidad en que se mueve, el hombre se vio obligado a dialogar con fuerzas y poderes violentos que tensan su voluntad y decisión obligándole a responder con extrema violencia los desafíos que le presenta la vida.No obstante, siempre deseó un mundo apacible. A tal extremo se dio esta obsesión que en los períodos de su historia más violentos y hostiles que vivió, no vaciló en imaginar paraísos terrenales donde la violencia no existía, donde las fuerzas de la naturaleza no aterraran con su potencia y espectacularidad; en donde hombres y pueblos que no se agredieran con una ferocidad increíble; en el cualenfermedades y tragedias individuales que lo desconcertara y lo sumerjan en un dolor infinito, un ideal que no encontró. De ahí su necesidad de escapar a tan terrible realidad, creando fabulosos reinos de paz y bienaventuranza, o creyendo en la existencia de tiempos pasados bellos, apacibles y felices sin mácula de dolor.
El hombre obstinado, recio e indomable, sobrevivió sobre sus circunstanciashostiles; más aún: se expandió con fuerza incontrastable por toda la tierra habitable, bien dispuso de los elementos adecuados para su despliegue y haciendo gala de una plasticidad genética única, ocupó todos los ámbitos geográficos con rapidez sorprendente.
En su camino, la violencia de los diversos medios seguramente lo agredieron con saña y si bien caían no pocos individuos, su marcha no sedetuvo hasta modificar su contexto.
En esta primigenia epopeya realizada por la especie humana, está la demostración palpable que supo imponerse en parte a la violencia objetiva, a la violencia del mundo que le rodeaba y que muchas veces cegaba su vida.
El propio individuo como hijo de la violencia natural advirtió desde muy temprano que contenía en su propio cuerpo una indomable fuerza que lotornaba violento y lo habilitaba para tornarse destructor.
La lúcida conciencia que el mortal siempre tuvo acerca de su estrecha convivencia con la violencia, hizo que éste la observara con extrañeza unas veces, con miedo otras y hasta una inexplicable curiosidad e interés por la fuerza que anidaba en su naturaleza y en el mundo.
En realidad, nunca dejó de observarla, aun cuando no encontrararespuesta satisfactoria; para conjurarla inventó divinidades sin cuerpo, representándola de las más distintas y caprichosas maneras. Todas las religiones dan testimonio de ello; todas las creencias y visiones humanas la vistieron de los rostros más caprichosos, aunque siempre relacionados con las experiencias propias de cada grupo, tanto en lo relativo a sus observaciones sobre el medio...