Cine
Páginas: 11 (2578 palabras)
Publicado: 6 de noviembre de 2012
A MANERA DE INTRODUCCION
EN LA APERTURA DEL CICLO DE CINE Y LITERATURA
EN EL MARCO DEL FESTIVAL DEL LIBRO INFANTIL/JUVENIL
SAN LUIS POTOSI, S.L.P., MEXICO-2006
Cine y Literatura
“En el otoño de 1959, Jean-Paul Sartre y John Houston pasaron una semana juntos en una morada irlandesa, propiedad del célebre director de cine: allí trataron de ponerse de acuerdo sobre el guión deFreud que el americano quería llevar al cine y que, por encargo suyo, Sartre había redactado en agobiantes trescientas páginas. Si al encuentro se le concede valor emblemático, se deduce cuan difíciles son las relaciones entre cine y la literatura.
Pocas veces dos personas se cruzaron sin entenderse de modo como lo hicieron aquellos dos gigantes; además de las dificultades materiales decomunicación (Sartre nunca habló inglés y el francés social de Houston quedó desbordado ante el don intelectual del parisino), se juntaron los inconvenientes espirituales; eran habitantes de planetas distintos: la máquina de pensar y el mago creador de imágenes.
Al final, Houston desechó el guión de Sartre sobre Freud y Sartre se fue convencido de la ignorancia supina del norteamericano”
Pues bien,es probable que esta anécdota pueda sugerir que la literatura y el cine no son buenos compañeros. Lo cierto es que no es así, por el contrario: han logrado fusionarse con gran tolerancia y virtud; así parece señalarlo el periodista Carlos González Peña, quien un 24 de enero de 1917, publicó en El Universal las siguientes líneas en un artículo sobre el particular:
“Lo extraordinario está enque el cine empieza a convertirse en el más ágil y seguro propagador de la literatura. Pobres de asuntos, los fabricantes de películas han ido a buscarlos en las obras maestras: las novelas de Balzac, de Zola, de Daudet, desconocidas por muchos, dánse a conocer en el cinematógrafo. Ultimamente hemos asistido a una maravillosa interpretación de la “Gioconda” de Gabriel D’Annunzio, y se noshumedecieron los ojos al ver representadas de bulto las páginas aladas de ternura y de gracia del más bello de los libros de Edmundo de Amicis.
¿Y quién duda que así realiza el cinematógrafo una obra admirable de cultura?
Consigue, ni más ni menos, que los perezosos y los analfabetos admiren las nobles creaciones del arte, aunque sea en lo exterior y lo plástico, en tanto que los letrados refrescanliterarias emociones.
Cierto es que falta la palabra y que muchos espirituales y delicadísimos matices que nos revela la voz del poeta sería imposible trasladarlos a la pantalla; pero algo es algo, y váyase lo uno por lo otro... Al oído lo sustituyen los ojos, y nobilísima es la impresión estética que nos dan las maravillas plásticas que ahora en las oscuras salas vemos”. Hasta aquí elperiodista mexicano de antaño.
El cine de ficción por lo general se ha alimentado desde sus orígenes, de tres fuentes de ideas o argumentos. La más eficaz ha sido siempre la de los guiones concebidos directamente para el cine, sea por una sola persona, sea por la combinación de dos o más.
Una revisión de las obras mayores del cine habrá de demostrar la abundancia de tales argumentoscinematográficos originales en la obra de Griffith, Eisenstein, Welles, Murnau, Bergman, Antonionni, Fellinni y Chaplin, por mencionar sólo algunos ejemplos.
La literatura y el teatro son otras dos fuentes prolíficas, y ambas dan habitualmente al cine un prestigio previo, que pude determinar el éxito comercial del resultado.
La literatura plantea numerosos problemas para su adaptación de loque nos ocuparemos más tarde, especialmente si no se trata de narraciones directas y claras, sino de obras muy elaboradas. Esto puede conducir a una deformación en la que se pierde la virtud artística del original.
Se ha observado, con razón que el cuento corto puede ser más apto que la novela para llegar a esa adaptación, en parte por sus menores dimensiones, en parte porque los cuentos...
EN LA APERTURA DEL CICLO DE CINE Y LITERATURA
EN EL MARCO DEL FESTIVAL DEL LIBRO INFANTIL/JUVENIL
SAN LUIS POTOSI, S.L.P., MEXICO-2006
Cine y Literatura
“En el otoño de 1959, Jean-Paul Sartre y John Houston pasaron una semana juntos en una morada irlandesa, propiedad del célebre director de cine: allí trataron de ponerse de acuerdo sobre el guión deFreud que el americano quería llevar al cine y que, por encargo suyo, Sartre había redactado en agobiantes trescientas páginas. Si al encuentro se le concede valor emblemático, se deduce cuan difíciles son las relaciones entre cine y la literatura.
Pocas veces dos personas se cruzaron sin entenderse de modo como lo hicieron aquellos dos gigantes; además de las dificultades materiales decomunicación (Sartre nunca habló inglés y el francés social de Houston quedó desbordado ante el don intelectual del parisino), se juntaron los inconvenientes espirituales; eran habitantes de planetas distintos: la máquina de pensar y el mago creador de imágenes.
Al final, Houston desechó el guión de Sartre sobre Freud y Sartre se fue convencido de la ignorancia supina del norteamericano”
Pues bien,es probable que esta anécdota pueda sugerir que la literatura y el cine no son buenos compañeros. Lo cierto es que no es así, por el contrario: han logrado fusionarse con gran tolerancia y virtud; así parece señalarlo el periodista Carlos González Peña, quien un 24 de enero de 1917, publicó en El Universal las siguientes líneas en un artículo sobre el particular:
“Lo extraordinario está enque el cine empieza a convertirse en el más ágil y seguro propagador de la literatura. Pobres de asuntos, los fabricantes de películas han ido a buscarlos en las obras maestras: las novelas de Balzac, de Zola, de Daudet, desconocidas por muchos, dánse a conocer en el cinematógrafo. Ultimamente hemos asistido a una maravillosa interpretación de la “Gioconda” de Gabriel D’Annunzio, y se noshumedecieron los ojos al ver representadas de bulto las páginas aladas de ternura y de gracia del más bello de los libros de Edmundo de Amicis.
¿Y quién duda que así realiza el cinematógrafo una obra admirable de cultura?
Consigue, ni más ni menos, que los perezosos y los analfabetos admiren las nobles creaciones del arte, aunque sea en lo exterior y lo plástico, en tanto que los letrados refrescanliterarias emociones.
Cierto es que falta la palabra y que muchos espirituales y delicadísimos matices que nos revela la voz del poeta sería imposible trasladarlos a la pantalla; pero algo es algo, y váyase lo uno por lo otro... Al oído lo sustituyen los ojos, y nobilísima es la impresión estética que nos dan las maravillas plásticas que ahora en las oscuras salas vemos”. Hasta aquí elperiodista mexicano de antaño.
El cine de ficción por lo general se ha alimentado desde sus orígenes, de tres fuentes de ideas o argumentos. La más eficaz ha sido siempre la de los guiones concebidos directamente para el cine, sea por una sola persona, sea por la combinación de dos o más.
Una revisión de las obras mayores del cine habrá de demostrar la abundancia de tales argumentoscinematográficos originales en la obra de Griffith, Eisenstein, Welles, Murnau, Bergman, Antonionni, Fellinni y Chaplin, por mencionar sólo algunos ejemplos.
La literatura y el teatro son otras dos fuentes prolíficas, y ambas dan habitualmente al cine un prestigio previo, que pude determinar el éxito comercial del resultado.
La literatura plantea numerosos problemas para su adaptación de loque nos ocuparemos más tarde, especialmente si no se trata de narraciones directas y claras, sino de obras muy elaboradas. Esto puede conducir a una deformación en la que se pierde la virtud artística del original.
Se ha observado, con razón que el cuento corto puede ser más apto que la novela para llegar a esa adaptación, en parte por sus menores dimensiones, en parte porque los cuentos...
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