Consenso de Washington

Marzo 8 de 2013
Julián Andrés Franco Culma
David Molina Bravo
Economía Pública – José Ignacio Diez Ruiz
Departamento de Economía – Universidad Nacional de Colombia, Medellín.

Consecuencias de la aplicación del Consenso de Washington en América Latina
¿Intervención internacional a costa de la intervención nacional?

América Latina en la década de los 80 atravesó por una crisis marcadapor el estancamiento económico y altas tasas de inflación. Sin embargo, el desempeño de los países no fue uniforme. En algunos momentos, en Bolivia (1985), en Perú (1988-90), en Nicaragua (1988-89), Argentina (1989-90) y en Brasil (1990) la tasa de inflación superó el 50%, apareciendo la hiperinflación. Algo nunca antes visto en la región. Ante dicha situación surgieron preguntas como ¿Qué hacerpara superar esta crisis?, ¿Esta situación se explica simplemente en el populismo de los políticos y en el exceso de intervención del Estado?, ¿es suficiente estabilizar y liberalizar?
El Consenso de Washington fue resultado de los problemas económicos que atravesó América Latina, y se entiende como un listado de políticas económicas consideradas durante los 90 por los organismos internacionales ycentros económicos, con sede en Washington D.C, como el mejor programa económico que los países latinoamericanos deberían aplicar para impulsar el crecimiento. Las políticas económicas del Consenso contemplaban: disciplina presupuestaria; reordenamiento de las prioridades del gasto público de áreas como subsidios hacia sectores que favorezcan el crecimiento; reforma impositiva; liberalizaciónfinanciera; un tipo de cambio competitivo; liberalización del mercado internacional; eliminación de barreras a las inversiones extranjeras directas; privatización de empresas públicas; desregulación de los mercados; y protección de la propiedad privada.
Es decir, el Consenso básicamente lo que proponía era minimizar la intervención del Estado en la economía de los países latinoamericanos. A travésde estas políticas, los países emergentes podrían darle un curso definitivo a su política económica con el objetivo de luchar contra la inflación y aumentar la competitividad, así como disminuir la deuda externa, y por tanto promover el crecimiento. Sin embargo, las conclusiones revelan que las reformas en América Latina orientadas por el Consenso de Washington, han sido decepcionantes en todos losfrentes mencionados.
Estas políticas llegaron a representar la dirección dominante de la política económica durante la década pasada, ya que muchos países empezaron a desmantelar las protecciones contra el comercio exterior, a privatizar empresas públicas y a sanear las finanzas públicas. Sin embargo, los resultados fueron mixtos. Por un lado, se logró abatir la inflación y hubo una mejoríanotable en
la eficiencia y competitividad. En muchos casos se resolvieron los problemas severos de deuda externa y se avanzó en la responsabilidad financiera de los gobiernos. Empezaron a fluir de nuevo los capitales privados tan necesarios para los países escasos de recursos propios. Por ejemplo, mientras América Latina recibió 14 mil millones de dólares de capital extranjero en 1990, hubo unaentrada de 86 mil millones de dólares en 1997.
Pero por otro lado, aunque el crecimiento económico fue un poco mejor que el de los 80, no logró recuperar las tasas de décadas anteriores. La pobreza siguió como uno de los problemas más agudos y la distribución del ingreso se volvió todavía más inequitativa. Encuestas de opinión pública realizadas a fines de los 90 indicaban que la mayoría de laspersonas sentían que su calidad
de vida era inferior a la de las generaciones anteriores.
El Consenso de Washington prometió mucho y por lo mismo, fue adoptado por muchos gobiernos. Sin embargo, fue más ilusión que resultados concretos. La gente se cansó de tantas reformas y terminó criticándolas como fuentes de su malestar. A pesar de que muchos estudios serios demuestran que la situación hubiera...