Discurso de despedida

Buenos días autoridades, maestros, maestras, padres de familia y compañeros presentes.

Es un gran honor para mí el tener la oportunidad de dirigir unas palabras de despedida a nombre de todos ycada uno de mis compañeros de esta generación tratando de incluir aquí lo que a cada uno le gustaría decir, espero no defraudarlos.
Es increíble que haya pasado tan rápido que hayan transcurrido yacuatro años, parece que fue ayer cuando fue nuestra primera semana de clase y todo lo que veíamos era nuevo para nosotros, cuando el enfrentarnos a un grupo de niños o adolescentes era lo máspreocupante, cuando nos era imposible imaginarnos que en cuatro años estaríamos culminando nuestra preparación como profesionales de la docencia
Hoy 8 de julio de 2010 es un día muy especial para todos losaquí presentes ya que es el momento más esperado y anhelado con el que soñábamos desde el primer día en que formamos parte de esta prestigiosa institución, recuerdo que en repetidas ocasionespronunciábamos cosas como: ¡ya no puedo más!, ¡ya quiero estar en cuarto!, ¡ya quiero que esto acabe! aun recuerdo los vacios que existieron en algún momento donde las exigencias pusieron en duda el seguiradelante, cuando admiraba a aquellos compañeros que se mostraban seguros de lo que pretendían hacer, las eternas noches de desvelo, las preocupaciones y los errores fueron una constante durante nuestrapreparación, las experiencias al trabajar con esas personitas que nos llamaran maestro, maestra aunque aun no lo fuéramos al menos legalmente nos enseñaron a querer y valorar la difícil tarea a la quehabíamos decidido dedicarnos el resto de nuestra vida

Durante estos cuatro años nuestra escuela nos brindo dentro de sus aulas la posibilidad de aprender más allá de los cursos impartidos, nos brindo laoportunidad de valorar a las personas por sus logros, a aplaudir los triunfos de otros, a tolerar, a respetar ideas, a saber que no siempre seremos los mejores, a tener paciencia, a ser más...