Diurno

DIURNO.

Caminatas largas con sol tenue de invierno, son los pasos mas livianos y exquisitos que he andado, mi salud cardiovascular no es la mas envidiable pero con algunos segundos de descanso meencontrare bien, necesitaba aspirar algo mas que el tabaco impregnado en las cortinas de la alcoba, una nueva sensación en mi nariz puesto que la humedad que dibuja mil rostros en las paredes ya sehabía convertido en mi esencia predilecta.

Estos nuevos hábitos que me he impuesto son una señal verdadera de que me hago viejo, es la corriente natural que se lleva con anticipados sonidos lasbuenas cosas de las personas y aun así los necios inconformes, los aferrados, comodones insisten en nadar corriente arriba con brazadas desincronizadas, un afán bufonesco si se analiza detenidamente.Para el caso da lo mismo si pretendo ser un critico de lo absurdo, aun así ahí me veo en lucha desigual contra la fiereza de las aguas turbias y fétidas me refiero a fétidas en el sentido que pierdensu pureza al mezclarse con la gran variedad de vicios y no muy sanas costumbres de los demás bañistas, en fin solo respiro profundo para dar la lucha a una causa perdida.

Miro mi reloj, marca las8:24 AM, vaya si me sorprende que exista vida a estas horas, uno imagina que el mundo muere con el cerrar de los parpados, que un conjuro general congela la vida cuando uno emprende el viaje gustosodel sueño.
Estoy fascinado, digamos que un tanto melancólico, de haberme enterado hace años que la vida germina a todas horas hubiera dedicado mis noches de bohemia y lagrimas hipócritas a dormitar enlos almohadones naranjas ofrendados por mi abuela y no dejarlos ahí bajo la escalera de caracol a que el moho los decorara con un pésimo gusto.

Que me ha vencido la angustia, con un gesto deimpotencia declaro un irrefutable si, la desgracia que me copio entre sus manos desde que era pequeño fu mi realidad, no culpo a los demás seria un tanto irresponsable de mi parte yo me amamante de sus...