Don segundo sombra
La carencia de orientación no significa que al pequeño Fabio le falten impulsos: se trata de un niño inteligente y, sobre todo, audaz; se trata de un pícaro que repudiael tedio y los dobleces que le brinda la vida del pueblo y que, además, se dedica a una tarea productiva elemental (la pesca) para sus propios fines. Fabio rechaza el cariño superficial que le ofrecen sus tías y prefiere realizar una modesta actividad para comprar sus golosinas antes que tener que depender de los mayores. La ausencia de orden no niega, por tanto, la existencia de un germen de lapersonalidad. Sabemos que Fabio quiere valerse por sí mismo y sabemos también que tanto la vida sosegada del pueblo como su moral hipócrita le resultan insufribles.
Por tanto, si bien la escena en la que don Segundo aparece cobra el aspecto de un revelación repentina, no se puede decir que esta iluminación se produzca desde el vacío: Fabio posee un ánimo predispuesto a toparse con aquellarevelación. La aparición de don Segundo, en efecto, se produce dentro de un fondo de nocturnidad que le confiere un matiz mágico en medio de un ambiente narrativo realista; sin embargo, no sentimos como extraña o precipitada la admiración que Fabio siente repentinamente por él:
Al cruzar una calle espanté desprevenidamente un caballo, cuyo tranco me había parecido más lejano, y como el miedo escontagioso, aun de bestia a hombre, quedéme clavado en el barrial sin animarme a seguir. El jinete, que me pareció enorme bajo su poncho claro, reboleó la lonja del rebenque contra el ojo izquierdo de su redomón; pero intentara yo dar un paso, el animal asustado bufó como una mula, abriéndose en larga "tendida". Un charco bajo sus patas se despedazó chillando como un vidrio roto. Oí una voz agudadecir con calma:
-- Vamos pingo… Vamos, vamos, pingo…
Luego el trote y el galope chapalearon en el barro chirle.
Inmóvil, miré alejarse, extrañamente agrandada contra el horizonte luminoso, aquella silueta de caballo y jinete. Me pareció haber visto un fantasma, una sombra, algo que pasa y es más una idea que un ser, algo que me atraía con la fuerza de un remanso, cuya hondura sorbe la corriente...
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