El niño y el significante
El niño y el Significante
Cuando se busca definir el concepto de "niño", pareciera que es algo sencillo; sin embargo, dicho concepto puede ser planteado y estudiado desde diversos enfoques.Particularmente, desde el punto de vista del psicoanalista, es allí donde comienza el problema.
En el trabajo terapéutico con niños, será importante el analizar la o las piezas fundamentales en lahistoria del paciente ante el conflicto que exprese en terapia; tras el análisis, podremos determinar qué cuestiones familiares, por ejemplo, de los padres, son proyectadas o se repiten en el paciente.Por ello, parte de nuestro trabajo terapéutico consiste en mirar más allá del niño, no inventarle una enfermedad o una patología para poder tratarlo; sin plantearse qué pasa allí donde el niño vive,o qué pasa con la escuela donde concurre, qué pasa en general en ese contexto donde se desarrolla a diario.
Para entender a un paciente de cualquiera edad, desde el psicoanálisis, tenemos queretroceder a donde él no estaba aún. Se trata de lo que rebasa, de lo que va más allá, de lo que nos baste con rastrear en el imaginario del paciente para descifrar la clave cuando hay que reconstruirmaterial de otras generaciones; ese algo significante, que se repite bajo transformaciones de generación en generación y que en el niño continua.
De acuerdo con Rodulfo (1989) 1.Para que algo, enpsicoanálisis, sea considerado significante tiene que repetirse. Una vez que hemos establecido el peso significante de una frase en el paciente, lo importante es qué hace el sujeto con ella.
2. Elsignificante conduce siempre hacia alguna parte.
3. El significante tiene dirección.
En la práctica clínica el significante sólo se hallará en boca del niño que nos traen, más no en la de los padres.Por ello, ciertas demandas de los padres estarán relacionadas con el deseo de vigilar, interferir o irrumpir en algo de su hijo que es privado, más que en la búsqueda de poder resolver el conflicto...
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