El problema de los universales en guillermo de ockham

El primer planteamiento explícito del problema de los universales se le debe a Porfirio. Sobre este tema desliza las siguentes tres preguntas: 1) si subsisten cómo substancias o no subsisten más que como conceptos en la mente. 2) en el caso de que subsistan en la realidad como substancias, si subsisten separados y fuera de las cosas sensibles o si no subsisten separados sino en las cosassensibles. 3) dado que existan separados de las cosas sensibles, si son substancias incorpóreas o corpóreas.
Vimos en el curso que este planteamiento es retomado luego por Boecio y por Abelardo. En este trabajo me gustaría analizar la postura que respecto a este problema tiene Guillermo de Ockham. La idea de que al concepto general le podría corresponder algo en la realidad extramental es rechazadapor Ockham como un error fundamental. Lo esencial del universal consiste en que se puede aplicar a varias cosas. Frente a ello, la individualidad es característica de las cosas realmente existentes. Lo que es único no puede ser ni plural ni signo de pluralidad. La existencia real y el ser universal se excluyen mutuamente. Con ésto queda rechazado todo realismo de los universales.
En laSuma de la Lógica, Ockham da a los universales es estatus ontológico de conceptos sin subsistencia en la realidad, cuyo único fundamento se encuentra en los individuos agrupados. La palabra y el concepto no son, como en una postura realista del problema, reproducciones del objeto ni aprehensiones de su esencia, sino signos que remiten al objeto. Los términos constituyen el instrumetal con el que ellenguaje y el pensamiento se relacionan con la realidad.
Ockham distingue dos sentidos del término signum. En su acepción más general, llama signo a “todo aquello que, conocido, conduce al conocimiento de alguna otra cosa, aúnque no conduzca a la mente al conocimiento primero de tal cosa (...) sino al conocimiento actual, una vez que se tiene el habitual” (Guillermo de Ockham, Ap. 3485).Así, se requiere un previo conocimiento que una al signo con la cosa designada. En este sentido la palabra hablada significa, como cualquier efecto, al menos su causa, como también el círculo significa el vino en la taberna. En un sentido más restringido, “signo es todo aquello que conduce al conocimiento de algo y es apto para suponer por ello o ser añadido a ello en la proposición” (Ibid). Aquiel signo tiene la función de sustituir el objeto designado. En este último sentido, la palabra hablada no es signo natural de nada.
Con esta distinción se relaciona estrechamente la división más general de los signos de Ockham. De un lado están aquellos signos que no dan un conocimiento primario de la cosa significada, y no lo dan porque exigen un conocimiento habitual de la relaciónsignificativa que liga al signo con el objeto. Estos signos lo son en la primera de las dos acepciones anteriores, pero no en la segunda. A estos signos Ockham los llama representativos, y su manera de significar puesto que se requiere el conocimiento anterior de la cosa significada, se basa en el recuerdo y es , por consiguente, una función rememorativa. Del otro lado están los signos lingüísticos, queson signos en la segunda de las acepciones citadas, pues no requieren conocimiento previo de lo significado, y dan, por lo tanto, un conocimiento primero del objeto. Su característica principal es que tienen como función peculiar sustituir al objeto significado en el contexto de la proposición.
Los signos rememorativos o representativos son divididos por Ockham en dos tipos: el vestigium yla imago. El vestigium significa por la relación de causalidad que guarda con la cosa designada. Como ejemplo podemos pensar en el humo que es signo del fuego en tanto que es su efecto. La imagen, en cambio, es signo de algo en cuanto que guarda con ello una relación de semejanza. Cualquier signo icónico, como una foto o un dibujo, nos ayudará a entender a que se refiere Ockham.
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