El suicidio

El suicidio.

Cap. VI - Formas individuales de los diferentes tipos de suicidios.

De la investigación se desprende que no hay suicidio, sino suicidios. El suicidio es siempre el acto en el que el hombre prefiere la muerte a la vida.
Cada suicida da a su acto una huella personal, que expresa su temperamento, las condiciones especiales en que se encuentra y que, por consecuencia, no puedeexplicarse por las causas sociales y generales del fenómeno. Se trata de encontrar la marca colectiva.
Se presenta de ordinario a todo suicida como un melancólico, para el que la existencia es una carga. Los actos por los que un hombre renuncia a la vida se ordenan en diferentes especies.
Existe una primera forma de suicidio: el Rafael de Lamartine nos ofrece el tipo ideal del mismo. Lo que lodistingue es un estado de languidez melancólica, que afloja los resortes de la acción. Los negocios, las funciones públicas, los deberes domésticos solo inspiran al sujeto la indiferencia y el alejamiento. LE REPUGNA SALIR DE SÍ MISMO. En desquite, el pensamiento y la vida interior ganan todo lo que pierde la actividad. Al desviarse de lo que lo rodea, la conciencia se repliega sobre sí misma, setoma como su propio y único objeto y se da por tema principal a analizarse. Pero sóloo PROFUNDIZA EL OBSTÁCULO QUE LA SEPARA DEL RESTO DEL UNIVERSO. No puede sino desligarse más de todo lo que no sea él, y consagrar, al reforzarlo, el aislamiento en el que vive. Al no mirarsemáss que a sí mismo, no puede la persona encontrar razones de ligarse a ninguna otra cosa más que a ella. TODO MOVIMIENTO ESALTRUISTA, porque es centrífugo y extiende al ser fuera de sí mismo. Lareflexiónn, al contrario, tiene algo de personal y de egoísta, no es posible sino en la medida en que el sujeto se desprende del objeto, y se aleja de él para volver sobre sí mismo. No se puede obrar más que mezclándose al mundo, es preciso tratar de confundirse con él, de manera que se le pueda contemplar desde afuera; esnecesario para pensar como uno mismo. Aquél, cuya completa actividad se convierte en pensamiento interior, se hace más insensible a todo lo que lo rodea. Si ama, es para meditar sobre su amor. Sus pasiones sólo son aparentes. Se disipan en vanas combinaciones de imágenes, sin producir nada que les sea exterior.
Si se separa demasiado radicalmente de los otros seres, hombres o cosas, se encuentraincomunicada con las fuentes mismas de donde debía normalmente alimentarse y no tiene nada a que poderse aplicar. Al hacer el vacío a su alrededor, ha hecho un vacío en ella, y no resta nada más en que reflexionar que su propia miseria. Ya no tiene otro objeto de meditación más que la nada, que está en ella, y la tristeza que es su consecuencia. Se abandona a ello con una especie de goce malsano.Pero no se puede quedar en contemplación ante el vacío sin ser progresivamente atraído hacia él. Cuando uno experimenta tanto placer en no ser, no puede satisfacer completamente su inclinación sino renunciando completamente a vivir. Es que la idea y el movimiento son, dos fuerzas antagónicas que progresan en sentido inverso la una de la otra; y que el movimiento es la vida. Se ha dicho que pensar esimpedirse a obrar (impedirse a vivir). La tristeza no es inherente a las cosas, ella no nos viene del mundo, y no es por el mundo sólo por lo que pensamos. Es un producto de nuestro propio pensamiento. Somos nosotros quienes la creamos por completo. Pero para esto es preciso que nuestro pensamiento sea anormal. Si la conciencia hace muchas veces la desgracia del hombre, es solamente cuando alcanzaun desarrollo enfermizo; CUANDO INSUBORDINÁNDOSE CONTRA SU PROPIO NATURALEZA SE CONSIDERA COMO UN ABSOLUTO Y BUSCA EN SÍ MISMO SU PROPIO FIN. Es estoicismo enseña también que el hombre debe apartarse de todo lo que le es exterior, para vivir de sí mismo y para sí mismo. Sólo que, como la vida no encuentra entonces su razón de ser, la doctrina lleva al suicidio. Estos mismos caracteres se...