Ensayo de bodas de sangre

ECONOMÍA Y POLÍTICA EN EL QUIJOTE
Por
Rodrigo Llorente Martínez
Releer el Quijote con un propósito, trasciende el simple gozo de su lectura, es ejercicio
estimulante que amplía la visión de la gesta de sus personajes centrales –Don Quijote y Sancho–
que proyectan perfiles creativos cuando abren a la imaginación la simple función económica de
producir riquezas, ensanchando así el vuelode sus vivencias.
Don Quijote –un idealista en los lindes de la locura, pero de un loco genial– pareciera sobrevivir
por razones esotéricas superiores, y Sancho, su escudero, recibe todo el peso de las cosas normales
de la vida y sin proponérselo logra objetivos aparentemente inalcanzables.
En la vida en sociedad de estirpe medieval es posible imaginar personajes de novela que nosiembran, ni hilan, ni cosechan y, sin embargo, proyectan la España del Siglo de Oro, que cien años
después del descubrimiento de América y de la colonización de sus tierras lejanas por soñadores
navegantes como Colón y conquistadores que entre sanchos y quijotes realizaron la proeza de
incorporar estas tierras y sus pueblos a una civilización con las energías de un exótico y novedosocontinente.
En el primer cuadro del Quijote que describe al personaje, no se hace referencia alguna a su
comportamiento y menos a su ética. Pareciera un personaje que viene de lo más alto, para
enfrentarse con otros. Se alimenta no se sabe cómo y sobrevive para realizar sus ideales
caballerescos. En la primera referencia que de él se hace como sujeto económico vende “muchas
fanegas de tierra desembradura” para comprar “libros de caballería en qué leer”, que recuerda el
gesto de la reina Isabel la Católica al vender sus joyas para financiar en forma quijotesca la aventura
del descubrimiento de América.
En cambio Sancho, al final del capítulo de su gobierno de la ínsula Barataria, se refiere a su
desempeño como al de un gobernante probo que le permite decir:“Llegué desnudo a este gobierno
y al salir de él quedé igualmente desnudo”. Debo hacer una observación, que vale por su aspecto
novedoso, sobre el nombre de la ínsula que gobernó Sancho Panza: Barataria. Esta palabra
posiblemente tiene relación lingüística con el nombre de la India de hoy día que en su acepción
original en sánscrito se denomina “Bharat” que Cervantes, a pesar de haber sido unviajero
impenitente, parece que no visitó este país inmenso, de regiones lejanas bañadas por inmensos ríos
con karma, como el Ganges (¿porqué no bañarnos así sea tímidamente con este neologismo tan
autóctono?), con aguas lustrales que dejaron limpia la desnudez inicial y final del personaje de la
escena en que se describe así mismo Sancho Panza al dejar el gobierno de su ínsula.
El oro y eldesempleo en España
España en esa época vivió y se enriqueció con el oro extraído de las minas americanas y de los
tesoros guardados por sus pueblos aborígenes: es la teoría de los autores mercantilistas en que la
producción en la metrópoli disminuye, desplazada por crecidas importaciones de bienes que se
pagan con el oro expoliado en sus colonias. Antes de este enfoque mercantilista lateoría de los
fisiócratas explica su sustento económico en la explotación agrícola de la tierra. El peso de la
economía en la lucha permanente de los conquistadores, que al crear riqueza colectiva por el oro
traído de las colonias provocaba desempleo masivo entre sus gentes, muchas de ellas reducidas a
ser “lazarillos y pícaros”, que a manera de gañanes desocupados mantenían la vidapopular de las
comunidades españolas. La Iglesia trajo al nuevo continente una ética morosa que contrasta con la austeridad calvinista y esas visiones crearon dos aproximaciones diferentes de desarrollo: la del
norte del continente americano con una sociedad capitalista e industrial, y la del sur, de estirpe
feudal, que al recortar los horizontes de las empresas autóctonas originaban muy...