Ensayo Descartes

UNIVERSIDAD LA GRAN COLOMBIA
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
LICENCIATURA EN FILOSOFÍA E HISTORIA
DESCARTES, HUME Y KANT
GUSTAVO ADOLFO GALLEGO BELTRAN

Sólo una enseñanza incompleta puede mostrar las dificultades de partida que se plantea un filósofo como absolutamente distintos de los que a nosotros mismos nos apuran. La expectación inicial de Descartes es lo más parecida a una crisis defe sobre sus más firmes doctrinas, como puede darse en cualquier individuo que se aproxime a su edad madura.
Así pues, los sentidos nos engañan a veces como ocurre en la ilusión de quietud, o en las ilusiones ópticas o  en las utopías de los sueños. Descartes desconfía, pues,  de todo el conocimiento, pues desconfía de los sentidos, y el dato de los sentidos es el inicio de todo conocimiento.Expone, al inicio del discurso, el comienzo de su aventura intelectual: cansado al fin de verdades obtenidas de débil evidencia y fiado sólo del método que le ha proporcionado absoluta certeza en el quehacer matemático, decide generalizar ese método a toda su actividad cognoscitiva, dando al traste provisionalmente, en tanto no logre firme fundamentación, con toda la horda de afirmaciones y débilescertezas.
 Concibe como método:
1) Dudar de todo aquello de lo que no tenga certeza absoluta. Si algo admite la más mínima posibilidad de duda, metodológicamente y de modo provisional, lo tendrá por absolutamente falso.
2) Descomponer todo problema en sus partes más simples.
3) Analizarlo procediendo de lo simple a lo compuesto.
4) Hacer al final recuentos tan exhaustivos que pueda tener seguridadde que ninguna de las partes ha escapado al análisis.
Decide seguir viviendo de modo que adquiera amplia experiencia de la vida antes de explicar este método, enrolarse en el ejército para poder viajar, conocer otros países y culturas, y lograr así experiencia, conduciéndose mientras tanto por la moral habitual que bien conocía, pero reputándola solo como una moral temporal. Diez años le llevaronsus correrías en busca de experiencias, hasta que juzgó que era maduro y había llegado el instante de aplicar implacablemente el método de la duda universal. Veamos cómo razona entonces, del modo que recoge en su discurso del método
Los sentidos, me engañan alguna vez; por ejemplo, cuando duermo. Luego metodológicamente pensaré que me engañan siempre. El resto de mis conocimientos empezaba porlos sentidos. Luego metodológicamente los tendré todos por falsos, a falta de fundamento.
¿Qué fundamento primero, firme, indudable, tendré como clavo a que agarrarme y del que colgar todo aquello que quisiera recuperar, fundamentándolo? Se da cuenta de que si llegase a establecer la fiabilidad de su propia facultad de conocer, estaría salvado pues entonces tendría por fundamentado y cierto todoaquello que su intelecto le presenta de modo claro y distinto. Para ello tendría a su vez que fundamentar la idea que tiene de Dios, un Dios creador y bueno, del que no es concebible que haya concedido a su criatura de una facultad de conocer, tan solo para engañarle. Pero recuerda que a Dios se llega en la filosofía que ha aprendido como la causa primera de unos seres de cuya existencia estádudando, pues al fin y al cabo los conoce por un entendimiento que se inicia en los pocos fiables datos de los sentidos, y que por tanto ha decidido poner en entredicho.
 Así pues admite al menos:
            1) un ser: se admite a sí mismo, como puro ser pensante
            2) el producto de este pensamiento que son las ideas.
Desde este único ser llegará a Dios,  erradicando desde él una cadena causalal más clásico estilo Tomista: yo no pude haberme creado a mí mismo (pues en caso de ser así,  me hubiera hecho  con  estas perfecciones que concibo y deseo, y no con esta imperfección en mí patente que supone, por ejemplo, el hecho mismo de dudar. Su propia duda es, pues, noticia de su imperfección, y ésta noticia de su contingencia). Quien me ha creado es causa de sí mismo (es Dios) o ha sido...