estudiante
A la casa de mi abuela –le contestó. -¿Qué camino vas a tomar, el camino de las agujas o el de los alfileres? -El camino de las agujas. El lobo tomó el camino delos alfileres y llegó primero a la casa. Mató a la abuela, puso su sangre en una botella y partió su carne en rebanadas sobre un plato. Después se vistió con el camisón dela abuela y esperó acostado en la cama. La niña tocó a la puerta. -Entra, hijita. -¿Cómo estás, abuelita? Te traje pan y leche. -Come tú también, hijita. Hay carne y vino enla alacena. La pequeña niña comió así lo que se le ofrecía; y mientras lo hacía, un gatito dijo: -¡Cochina! ¡Has comido la carne y has bebido la sangre de tuabuela! Después el lobo le dijo: -Desvístete y métete en la cama conmigo. -¿Dónde pongo mi delantal? -Tíralo al fuego; nunca más lo necesitarás. Cada vez que se quitaba una prenda (elcorpiño, la falda, las enaguas y las medias), la niña hacía la misma pregunta; y cada vez el lobo le contestaba: -Tírala al fuego; nunca más la necesitarás. Cuando la niña se metióen la cama, preguntó: -Abuela, ¿por qué estás tan peluda? -Para calentarme mejor, hijita. -Abuela, ¿por qué tienes esos hombros tan grandes? -Para poder cargar mejor laleña, hijita. -Abuela, ¿por qué tienes esas uñas tan grandes? -Para rascarme mejor, hijita. -Abuela, ¿por qué tienes esos dientes tan grandes? -Para comerte mejor, hijita. Y ellobo se la comió. Cuento oral popular de la Francia del siglo XVIII, extraído de Le conte populaire français de Paul Delarue y Marie Louise Tenèze (París, 1976).
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