Etica

Esta comunicación esboza la génesis y las reflexiones preliminares más destacables entorno a un imprescindible planteamiento ético que sea capaz de integrar y abordar la realidad socio-ecológica en su dimensión global. Se trata, por lo tanto, de un ensayo de fundamentación y proyección de una ética global; y pretende ser una aportación filosófica, en un estilo abierto y fragmentario, a lasdiscusiones de este congreso.

1. La ética (ethos)
Ante el resurgimiento -o renacimiento- de la conciencia ecológica y naturalista en el pensamiento de la época industrial, se han desplegado nuevos planteamientos éticos que, en gran parte, han sido canalizados a través del desarrollo de una ética ecológica. Además, otras propuestas éticas también se han abierto paso, entre las quedestaca, por ejemplo, la ética discursiva inaugurada por K. O. Apel y J. Habermas en Frankfurt a principios de la década de 1970, en la que tratan de devolver a la ética su vigencia y liderazgo racional en una realidad social plural en la que cabe establecer una comunicación intersubjetiva. Ambos ejemplos muestran que la reivindicación de la ética parece consolidarse, y lo hace en una doble proyecciónecológica y socio-antropológica.
Cabe, ante todo, investigar sucintamente el sentido de recuperar el valor esencial de la ética en la consciencia. El análisis etimológico del término ética, que proviene del griego ethos, lo insinúa de un modo genuino. Ethos, más allá de designar "morada" o "lugar donde se habita", significa conjuntamente "carácter", "talante", "modo de ser", "estilo devida", y "disposición del hombre en la vida"[1]. El significado del ethos griego revela, pues, que la ética es propiamente el carácter de la consciencia ante la realidad, el talante racional y vital que guía la praxis filosófica humana. Y, en consecuencia, el sentido de la ética -su esencia- es ser el fundamento de la praxis humana, el despliegue de la filosofía como praxis; es decir, el modo deser filosófico de la consciencia que la gobierne en la compleja travesía de la existencia.
Reivindicar la ética es, pues, exigir un carácter -un estilo de vida- de profunda constitución filosófica -y por ello basado en el ser vital y racional del hombre-, que fundamente y propulse la dinámica práctica de la consciencia, del hombre y de la humanidad planetaria.

2. La realidadplanetaria y la génesis de la ética global
La propuesta de una ética global no incluye solamente reivindicar una fundamentación ética de la praxis humana, sino también dotarla de una perspectiva global, planetaria.
La instauración de planteamientos globales, planetarios, es la respuesta más coherente a dos fenómenos históricos irreversibles. Por una parte, la humanidad enterase ha conocido y reconocido a sí misma como una entidad plural constituida por las diversas culturas y sociedades humanas, cada vez más interrelacionadas e interdependientes. Por otra parte, la humanidad parece iniciar la comprensión de la biosfera como un macrosistema organísmico en el que la especie humana se halla diluida, y de cuyo equilibrio depende la calidad de vida y las expectativas de lapropia humanidad.
La realidad, pues, se destaca en una doble dimensión global: la biosfera y la humanidad (o antroposfera). En consecuencia, la sed de comprender filosóficamente esta realidad, la de un planeta que se define como vivo y consciente -Gaia-, sólo será saciada con el desarrollo de planteamientos globales apropiados.
Además, la reivindicación de un talanteglobal en la consciencia es imprescindible para lograr una praxis eficaz y razonable ante unos profundos problemas ecológicos y humanos de alcance planetario. Entre ellos, por ejemplo, cabe recordar las injusticias que padece la humanidad, tales como las indignas condiciones de vida que sufren millones de seres humanos o la frecuente degeneración del contacto entre culturas en una pretensión...