Fototerapia

La fototerapia con dosis intermedias de UV-A1 pulsado podría ser óptima para la esclerodermia


Según un nuevo estudio publicado en el número de julio de Archives of Dermatology, los beneficiosde la irradiación ultravioleta A1 a altas dosis para el tratamiento de las enfermedades escleróticas cutáneas piel son atenuados por el bronceado dependiente de la dosis. La reducción de la frecuenciay de la dosis de las exposiciones puede hacer desaparecer mejor las lesiones fibrosas cutáneas.
Debido a sus mayores longitudes de onda (de 340 a 400 nm), la irradiación UV-A1 es menos eritemogénicay penetra más profundamente en la dermis que los UV-A2 o los UV-B. El Dr. Frank Wang, de la University of Michigan Medical School en Ann Arbor (Michigan, Estados Unidos) y sus colaboradores, señalanque algunas publicaciones indican mejorías espectaculares en la mayoría de los pacientes con esclerodermia tratados con UV-A1.
El equipo del Dr. Wang describe sus resultados con 12 pacientes conenfermedad esclerótica cutánea tratados con UV-A1 a altas dosis (130 J/cm), 3 veces a la semana durante 14 semanas.
Según los autores, el primer tratamiento produjo unas respuestas antifibrosassustanciales en nueve pacientes, pero los efectos disminuyeron con el tiempo. El único efecto colateral fue el bronceado de la piel en las primeras 2 semanas del inicio del tratamiento, pero estahiperpigmentación evitó una mayor degradación del colágeno en la dermis.
Decidieron entonces reducir la dosis en los siguientes seis pacientes (65 J/cm), cuyas lesiones mejoraron pero no desaparecierontotalmente.
Los investigadores descubrieron que los cambios producidos por la fototerapia (descenso de la síntesis de colágeno y aumento de la matriz de metaloproteasas) aparecieron a los pocos días de laexposición, seguidos por un ablandamiento significativo de la piel esclerótica varias semanas después.
Por eso, los autores proponen que la fototerapia pulsada en “tratamientos únicos, separados...