Hacia una teología postidealista

HACIA UNA TEOLOGÍA PÓSTIDEALISTA

En la teología católica se ven reflejados tres modelos de teología, los cuales contienen potencia teológica en sentido católico.

El paradigma neoescolástico. Sigue siendo ampliamente predominante. Sin empequeñecer los méritos efectivos de la neoescolástica en el s. XIX y en los comienzos del XX, este paradigma se caracteriza como una formadefensivo-tradicionalista, no productiva, de enfrentarse con los retos de la modernidad.

El paradigma trascendental-idealista. Se distingue por el intento de recuperar las tradiciones de los Padres y de la escolástica desde un afrontamiento agresivo y productivo de los retos de la modernidad europea: descubrimiento de la subjetividad como crisis de la metafísica clásica; confrontacióncrítico-positiva con Kant, con el idealismo alemán y el existencialismo por untado, y con los procesos sociales de la secularización y la civilización científica por el otro. El desarrollo de este paradigma se debe sobre todo a K. Rahner.

El paradigma postidealista. Para entender este paradigma es necesario identificar las nuevas crisis y luego intentar explicar por qué y en qué sentido la teologíaahora exigida, que trata estas crisis con intención salvadora, es una teología política o así puede llamarse (aunque este término esté muy expuesto a equívocos)
Son tres estas crisis en las que prende este paradigma, las cuales no es posible abordarlas con los instrumentos neoescolásticos ni con los trascendentales-idealistas.
1. El reto marxista, o la teología ente el final cognitivo de suconcepto dualista de la historia.
2. el reto de la catástrofe de Auschwitz, o la teología ante el final de todos los sistemas de sentido e identidad idealistas y ajenos al sujeto
3. el reto del tercer mundo, es decir, el reto de un mundo dividido socialmente y culturalmente policéntrico, o la teología ante el final del llamado eurocentrismo.

a) El reto marxista
Es interesantedarnos cuenta que con la filosofía y la teología tradicional hemos afrontado el tema del conocimiento y la verdad desde argumentaciones muy abstractas y helenizadas. Ahora bien, ya que Marx afirma que «todo conocimiento está condicionado por el interés» tenemos que decir que los intereses sólo pueden ser capaces de verdad si son universales o susceptibles de serlo, es decir, si pueden referirse atodos los hombres. Es entonces aquí donde la nueva teología política habla de un interés universal o universable basado en las tradiciones bíblicas mismas: el «hambre y sed de justicia».
También frente al marxismo, el nuevo paradigma se concibe como una teología de intención práctico-crítica. Es necesario señalar que para el cristianismo sólo existe una historia: no existe una historiauniversal y «junto a ella» o «por encima de ella» una historia de la salvación. Y es que en la historia de la salvación de la que habla la teología cristiana está presente la esperanza de una justicia universal.
El nuevo modelo de teología es de un cristianismo comprometido con la idea de la liberación y no se puede limitar ya sea a una aceptación o a un rechazo del marxismo; este modelo va más alláde esto, ha de convertirse en «crítico» del marxismo, pues cristianismo y marxismo difieren en la cuestión de la violencia.

b) El reto de la catástrofe de Auschwitz
Le es necesario a la teología cristiana la historia en su negatividad. Pero esta aceptación ha de tener el cuidado de no estancarse en dicha negatividad, sino que ha de recordarse con una intención práctico-política.
Loconcreto del nuevo paradigma teológico ante el reto del final de los sistemas idealistas y ajenos al sujeto, está en la lucha por la historia como lugar constitutivamente amenazado de la búsqueda y el testimonio teológicos de la verdad. Avanzando a profundidades que pudieran aclarar este punto, hay que decir que la memoria passionis como categoría bíblica se convierte en categoría universal,...