Herroy un Humano Muy Diferente 2

HERROY, UN HUMANO
MUY DIFERENTE

Toda ésta historia empezó con un “¡Vile more, Fa natu!”
traducido a vuestro idioma como un “¡Mira cariño, ya
llega!”.
Ese fue el grito que emitió mi padre al ver que mi cápsula
de nacimiento llegaba a sus manos.
Probablemente te estés preguntando de que estoy
hablando, pero eso lo descubrirás tú mismo más
adelante.
No recuerdo mucho de ese día, pero si recuerdola cara
de felicidad que se formó en el rostro de mis padres al
verme salir de la cápsula que os hablo.
Seguidamente me llevaron a casa, me dieron lo que iba
a necesitar para vivir, me enseñaron a hablar y me
criaron hasta el día de hoy.
Ahora tengo quinientos mil años, que igualarían la edad
de 25 años de un humano, pero cuando conseguí mi
sueño fue un par de siglos atrás, cuando tenía
doscientosmil años, que igualarían la edad de 16 años
de un humano y dos siglos después de descubrir que la
hermosa esfera microscópica que se dibujaba a lo lejos
de nuestro planeta se llamaba Tierra.
Cuando descubrí de su existencia, me sentí maravillado,
era un planeta completamente distinto al nuestro.
Busqué información sobre éste y descubrí cosas
inimaginables que hicieron que mi interés por llegar aél
incrementara.
Pero había una pega, una pega tan grande que
cambiaba por completo el punto de vista que en un
principio me había planteado.

-Milure, ¿holey e milose na plate note? (Madre, ¿alguien
ha viajado a ese planeta alguna vez?)-. Pregunté.
-Nule (No)-.
-¿E Kia? ¿Uye me no taru herés en fomenu bolye?
(¿Porqué? ¿Es que a caso no tienen interés en saber
que se esconde en él?)-.
-Kreso, bolenote worax (Lo tienen, pero nadie quiere ir)-.
-¿E kia? (¿Por qué?)-.
-E kiato sur hel vonute zur nonu xakatto e'h nuwe monus
zumale kakasone e'h nulates, porku povlum kwe (Por
que se dice que viven unos seres realmente extraños
llamados humanos y se ve que son unas bestias feroces
que maltratan la naturaleza y a los animales, es por eso
que nadie se atreve a ir)-.
A pesar de lo que me había dichomi madre, ninguna de
sus palabras me echaron hacia atrás.
-Olu e mu trase, ¿Va en kuki tamo? ¿muh gego la?
(Pues yo si que me atrevo, ¿cómo se puede llegar a él?
¿Con una nave basta?)-.
-Nule, Nule, foru, e'h nule fore he. Lome jascom vulla
glege, tureso nigapro gablaco (No, no basta, y no vas a
ir. Por mucho que tengas el valor suficiente para viajar,
tenemos prohibido hacerlo)-.
Me quedémirando a mi madre algo resignado, me di
media vuelta y me fui.
Obviamente no hice caso, porqué yo nací así de
cabezota y empecé a buscar mucha más información
sobre la Tierra y sobre la manera de llegar a ella.
Descubrí, entre otras tantas cosas, que habían elevadas
temperaturas en verano, que resultaba ser una estación,

y luego estaba el invierno, que se encontraba a bajos
grados, en algunos casos,incluso a bajo cero.
En el nuestro siempre era de día y des de que llegué a él
hacía la misma temperatura, pero en la Tierra había algo
que se llamaba “el día” y “la noche”, es decir, por lo que
yo entendí, habían unas horas del día determinadas en
la que se hacía oscuro.
Busqué y rebusqué la manera más rápida que había
para llegar, pero no hallé mucha variedad de información
a elegir, así quedecidí usar el vehículo que siempre
solíamos usar para desplazarnos por el espacio y los
planetas vecinos; mi querida la nave espacial.
Y lo hice cuando todo el mundo estaba durmiendo.
Cogí provisiones y amosífol por si se me acababa por el
camino.
Por cierto, si te has quedado un poco desconcertado al
leer la palabra “amosífol” significa, lo que yo relacionaría,
lo que vosotros usáis para que loscoches funcionen, es
decir, el carburante, pero para nuestros aparatos.
Bueno, volviendo al tema anterior y cómo te iba
contando, cogí lo que creí necesario y me puse en
marcha.
No se lo dije nadie, ni siquiera a mi familia, ya que
estaba convencido de harían todo lo que estuviera en
sus manos para echarme atrás, y eso era precisamente
algo que no quería.
Al subir a la nave, puse el piloto...