hola
Índice
Prologo…………………………………………………………………………………1
Amado Nervo………………………………………………………………………….2
Ignacio Rodríguez Galván…………………………………………………………...8
Sor Juana Inés de la Cruz…………………………………………………………..15
Gustavo Adolfo Bécquer…………………………………………………………….19
Pablo Neruda…………………………………………………………………………22
Bibliografías…………………………………………………………………………..29
Compiladores………………………………………………………………………....31Prólogo
En esta antología encontraremos poemas sobre el amor de diferentes autores hispanohablantes como Pablo Neruda, Amado Nervo, Ignacio Rodríguez Galván, entre otros. Estos autores fueron elegidos entre muchos por ser de los mejores y más reconocidos de la lengua española.
Aquí en este libro, no tienes sólo hojas con poemas, tienes enfrente de ti nada más y nadamenos que los suspiros del corazón de los poetas, traducidos por su pluma y plasmados en un papel para usted.
Con estos poemas te vas a entretener mientras los lees, también, conocerás los sentimientos de los autores, al momento que escribieron los poemas.
Amado Nervo
Amado Nervo era el seudónimo de Juan Crisóstomo Ruiz de Nervo, o en realidad, así trascendió engran parte del mundo. La verdad es que su padre modificó su apellido de Ruiz de Nervo a simplemente Nervo, y le dio su nombre a su hijo, Amado. El propio escritor ha bromeado con que parte de su éxito puede deberse a la sonoridad de su nombre. Se destacan en este poeta del movimiento modernista nacido en 1870 en Tepic, sus poemas La sombra del Ala, En paz, Orfertorio, Me besaba mucho, Una flor en elcamino y Madrigal.
El Primer Beso
Yo ya me despedía.... y palpitante
cerca mi labio de tus labios rojos,
«Hasta mañana», susurraste;
yo te miré a los ojos un instante
y tú cerraste sin pensar los ojos
y te di el primer beso: alcé la frente
iluminado por mi dicha cierta.
Salí a la calle alborozadamente
mientras tu te asomabas a la puerta mirándome encendida y sonriente.
Volví la cara en dulce arrobamiento,
y sin dejarte de mirar siquiera,
salté a un tranvía en raudo movimiento;
y me quedé mirándote un momento
y sonriendo con el alma entera,
y aún más te sonreí... Y en el tranvía
a un ansioso, sarcástico y curioso,
que nos miró a los dos con ironía,
le dije poniéndome dichoso:
-«Perdóneme, Señor esta alegría.»En Paz
Muy cerca de mi ocaso, yo te bendigo, vida,
porque nunca me diste ni esperanza fallida,
ni trabajos injustos, ni pena inmerecida;
porque veo al final de mi rudo camino
que yo fui el arquitecto de mi propio destino;
que si extraje las mieles o la hiel de las cosas,
fue porque en ellas puse hiel o mieles sabrosas:
cuando planté rosales, cosechésiempre rosas.
...Cierto, a mis lozanías va a seguir el invierno:
¡más tú no me dijiste que mayo fuese eterno!
Hallé sin duda largas las noches de mis penas;
mas no me prometiste tan sólo noches buenas;
y en cambio tuve algunas santamente serenas...
Amé, fui amado, el sol acarició mi faz.
¡Vida, nada me debes! ¡Vida, estamos en paz!
Me Besaba Mucho
Me besabamucho, como si temiera
irse muy temprano... Su cariño era
inquieto, nervioso. Yo no comprendía
tan febril premura. Mi intención grosera
nunca vio muy lejos
¡Ella presentía!
Ella presentía que era corto el plazo,
que la vela herida por el latigazo
del viento, aguardaba ya..., y en su ansiedad
quería dejarme su alma en cada abrazo,
poner en sus besos una eternidad.Tanto Amor
Hay tanto amor en mi alma que no queda
ni el rincón más estrecho para el odio.
¿Dónde quieres que ponga los rencores
que tus vilezas engendrar podrían?
Impasible no soy: todo lo siento,
lo sufro todo...Pero como el niño
a quien hacen llorar, en cuanto mira
un juguete delante de sus ojos
se consuela, sonríe,
y las ávidas manos
tiende hacia...
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