Investigación externa

Argentina y sus paradojas: análisis histórico sobre el conflicto del campo
Miguel Patrón
Viernes 21 de agosto de 2009, por Revista Pueblos
La historia de la Argentina gira en gran medida en torno del campo y su relación con la sociedad. Desde los comienzos de esta nación como Estado a mediados del siglo XIX y hasta la segunda Guerra Mundial, los dirigentes políticos y los grupos de poderprovenían del sector rural terrateniente. Hablar del campo en Argentina significa nombrar por un lado, a una oligarquía terrateniente que con puño de hierro mantuvo una política de explotación del campesinado pobre, y por otro una gran masa de arrendatarios que, si bien no integraban el ejercito zafrero y vivían de su propia cosecha, estaban siempre en condición de arrendatarios sin la mínimaposibilidad de adquirir su propia parcela.

Esta elite económica provenía de las familias patricias criollas. Tempranamente supo unirse al capital extranjero, en este caso de la mano de la casa inglesa Baring, para plantear los cimientos de una alianza que hasta el día de hoy perdura. Esta alianza tuvo como objetivo principal hacerse con las tierras en medidas inconmensurables, llegando a casos tandisparatados e insólitos como que una sola de estas familias, los Menéndez Behety, tenía tierras en la Patagonia del tamaño de un país pequeño de Europa. Esto daba como resultado que los millones de inmigrantes provenientes de toda Europa sólo podían ingresar en la familia rural como campesinado pobre integrando el ejército zafrero o en el mejor de los casos llegar a ser arrendatarios de por vida. Eracasi imposible tan solo pensar que una de estas familias pasara a ser propietaria de las tierras que cultivaban. Los créditos hipotecarios no existían y si existían era usureros.
A principios del pasado siglo, cuando la Argentina empezaba el camino del "progreso", arribaban a estas costas mas de un millón y medio de inmigrantes. Venían de aldeas miserables donde el sueño de hacer las Américas seles presentaba como una esperanza de vida. Nada sería gratis, o cuanto menos fácil. El sueño de la casa propia, la educación de los hijos o un futuro descansado con el respaldo de un taller o tienda propia costaría sangre, sudor y lágrimas. Toda una generación debía pasar para alcanzar este objetivo. Sin embargo estos capitales foráneos vieron crecer sus arcas con ganancias descomunales.Invirtiendo en la infraestructura que necesitaría este incipiente país exportador de granos y carnes, vieron multiplicar sus capitales exponencialmente.
Desde la creación de ferrocarriles, frigoríficos, puertos, comercios, hasta la financiación de préstamos al propio Estado, el capital británico en la Argentina creció casi 20 veces desde 1880 y 1913. A los rubros tradicionales antes mencionados se lesumaban bancos y financieras que operaban como casas exportadoras monopolizando la compra de los granes y las carnes destinadas a la exportación, y tan unido estaba el Estado, que le aseguraban a estas empresas británicas sus ganancias mediante exoneraciones impositivas, subsidios y hasta tierras a los costados de los miles de kilómetros de las vías férreas. De los 2500 km existentes en 1880 se pasó a34.000 en 1916. Esta expansión requirió abundante mano de obra que aportó Europa en cantidades crecientes a partir de 1880. El Estado apoyó esta inmigración, primero en forma selectiva y luego a brazos abiertos, incentivado por los terratenientes necesitados de hombres para trabajar sus campos, al punto de llegar a pagar pasajes y subsidiar grandes campañas publicitarias en los países de origende estos inmigrantes donde se prometía trabajo, casa, o parcela de tierra y escuela pública para sus hijos. Este ultimo estandarte del gobierno de Domingo F. Sarmiento, sirvió para amalgamar tan diversa masa de gente con lenguas y cultura diferentes, que aceleró un proceso de integración de gentes proveniente de tan diversos lugares con la población criolla. Para hacerse una idea de esto,...