Juliana gonzalez

Louisa Ogden 11 de marzo del 2011
= Excelentes profesionales y comprometidos ciudadanos =
El libro empieza a plantearnos estas dospreguntas: ¿qué estudiante universitario deberíamos formar en estos tiempos que corren? Y ¿por qué tipo de estudiante universitario tiene sentido apostar?
El autor nos habla en general de la preocupaciónque hoy en día genera a las instituciones la formación de nuevos profesionistas que no solo sean especialistas y buenos para lo que estudian sino también en la formación de ciudadanos con ética,códigos deontológicos, moral, valores, etc.
El sentido de la formación en el s.XXI es la construcción de personas con rasgos humanos y apostar por la construcción de personas con rasgos éticos y moralesen el mismo proceso formativo.
Las sociedades postindustriales con carácter democrático, inmersas en procesos de globalización económica, confiadas en las nuevas tecnologías de la información y lacomunicación y con nuevos retos presentes y de futuro como son la acogida de personas de otros países, necesitan más que nunca ciudadanos con rasgos éticos.
La nueva realidad empresarial y lasorganizaciones ya no demandan el mismo profesional de años atrás. La nueva figura profesional incluye un nuevo contexto profesional en continuo movimiento, sin espacio y sin tiempo asegurado, con continuas yaceleradas incorporaciones de nuevos conocimientos y técnicas de trabajo, demanda un profesional con la cabeza bien ordenada, que sepa una ciencia pero que sepa también aprender dicha ciencia, quesepa también desaprender y aprovechar los obsoletos para volver a aprender otros nuevos.
La reforma de la universidad no puede concentrarse únicamente en una democratización de la enseñanzauniversitaria y de la generalización del estado de estudiante. Se trata de una reforma que concierne a nuestra aptitud para organizar el conocimiento, es decir para pensar.
En la universidad parecen haber...