La Familia Como Foco De Intervencion

La presente búsqueda bibliográfica tiene como fin profundizar de manera teórica aquello que define y comprende al conjunto familiar con la creencia de que lo que allí acontece impacta sobre la salud mental y desarrollo del niño como ser ocupacional.
Este interés surge debido a lo observado en la clínica con niños que sufren TEA en el Hospital “Dra. Carolina Tobar García” (dentro del Programa deResidencia de Terapia Ocupacional) en donde desde el acontecer de la práctica diaria con los niños aparece la necesidad de la búsqueda de herramientas teóricas para crear estrategias de intervención dirigidas hacia la familia con el fin de favorecer el desempeño ocupacional del niño.

“LA FAMILIA COMO FOCO DE INTERVENCIÓN”

LA IMPORTANCIA DE LOS CUIDADOS PARENTALESDURANTE LOS PRIMEROS MOMENTOS DE VIDA PARA LA ESTRUCTURACIÓN PSÍQUICA DEL NIÑO DESDE EL PSICOANÁLISIS

Freud[1]concibe al viviente humano desvalido e incapaz de llevar a cabo la acción específica necesaria para cancelar la insatisfacción proveniente de la tensión endógena que le producen sus necesidades básicas de hambre y abrigo.
El lactante nace desamparado en comparación con la completud delos animales, debido a que está dotado de pulsiones y no de instintos, que le aportarían esquemas de conducta heredados y que le resolverían todos sus problemas de adaptación. Muchos autores consideran al neonato como un prematuro, ya que, hasta aproximadamente el año de vida necesita de un “útero psicológico”, de una simbiosis psicológica con la madre para completar su desarrollo intrauterino. [2]La imposibilidad de autopercatación del infante de su malestar y la incapacidad para resolverlo requieren de un “adulto auxiliador observador” que pueda leer los indicios en este proceso de hominización.


Freud llamó “yo de realidad inicial” a la instancia incipiente que ha distinguido un adentro y un afuera según una buena marca objetiva: el infans, casi inerme, muy pronto se halla encondiciones de establecer
un primer distingo y una primera orientación entre estímulos de los cuales puede sustraerse mediante una acción muscular y otros estímulos frente a los cuales una acción así resulta inútil, pues conservan su carácter de esfuerzo constante. A los primeros, los imputa a un mundo de exterior, mientras que los segundos; son la marca de un mundo interior, correspondiente anecesidades pulsionales. En la eficacia de su actividad muscular es que el viviente humano encuentra un asidero para separar un afuera y un adentro. El concepto de yo de realidad inicial plantea una primera discriminación “objetiva” entre estímulos interiores y exteriores que se subsumirán al principio de placer-displacer, posterior a la vivencia de satisfacción.[3]
Los cuidados parentales satisfacensimultáneamente las pulsiones auto-conservativas a través de la satisfacción real de la necesidad, y las pulsiones sexuales a través del plus libidinal que acompaña esos cuidados, ubicando al infans bajo predominios del principio del placer. Así el desvalimiento es reemplazado por un yo placer que prolonga el estado narcisista primordial. El precario Yo en constitución rechaza aquello que puedadevenir fuente de displacer, lo arroja hacia afuera. El Yo placer quiere introyectarse todo lo bueno, proyectando la hostilidad hacia el exterior.
Green refuerza este punto planteando que; “este Yo de placer purificado, núcleo de experiencias placenteras, es indispensable para adquirir una organización mínima que permitirá al sujeto tolerar posteriormente lo desagradable.”[4]
Freud[5] enfatiza queesta característica del psiquismo humano es el punto de partida de sustanciales perturbaciones patológicas. El logro de la discriminación yo-no yo, interior-exterior es uno de los primeros desafíos en la constitución de la subjetividad. Ubicar vía observación estos momentos constituye un aporte fundamental a la detección temprana de potenciales amenazas a la salud mental futura del sujeto....