Los derechos como ficciones útiles

Adela Cortina
Capítulo 8 “Una teoría de los Derechos Humanos

1- Los derechos como ficciones útiles
Maclntyre en su trabajo llega a la siguiente conclusión sobre los derechos humanos: “no existen tales derechos y creer en ellos es como creer en bruja y unicornios”, esto se demuestra a través de todos los fracasos por intentar mostrar que existen. Por lo tanto la noción de derechos humanos esuna ficción moral que pretende proveernos de un criterio objetivo e impersonal sin conseguirlo. Utilidad y derechos humanos son conceptos fingidos para resolver determinados fenómenos y que frecuentemente entran en disputa.
Esta afirmación se basa en el marco del diagnóstico sobre la situación del lenguaje moral de nuestro tiempo. Nuestro lenguaje moral es un conjunto de fragmentos, que formó enépoca griega una unidad coherente, pero que hoy se conecta de una forma incoherente, porque perdió el contexto que en Grecia le daba sentido. La teleología enraizada en un concepto funcional del hombre justificaba las reglas morales, como aquellas que se deben cumplir para alcanzar el télos propio del hombre. Sin embargo el protestantismo y el jansenismo incorporan un nuevo concepto de razón,que es incapaz de conocer el verdadero fin del hombre. Esta imposibilidad es lo que hace del proyecto ilustrado de fundamentar racionalmente la moralidad un proyecto fracasado. Divorciados el uso y el significado de las expresiones morales en nuestra época, el movimiento irracionalista se ha incorporado a nuestra vida social. Continuamos asignando a las expresiones morales el significado quetendrían, pero estas están vacías de contenido, sólo poseen el valor emotivo e irracional porque ya sabemos que en su totalidad han fracasado.
El retorno a la racionalidad de lo moral pasa por el retorno a la premodernidad, porque el proyecto moderno conduce necesariamente al emotivismo.
Sin embargo, tal vez Maclntyre no esté en lo cierto. Tal vez el emotivismo no sea la resultante del proyecto moralilustrado, sino el resultado de una desviación de las metas que lo precedían. Pretendo intentar esbozar una teoría de los derechos humanos, fundada racionalmente en la ética discursiva, una de las propuestas neoliberales actuales.
Si fundamentaciones racionales de este tipo, fueran posibles quedaría invalidado el discurso para el que los derechos humanos son ficciones, como es el caso deMaclntyre, entre otros. Como también las afirmaciones del pragmatismo de Rorty, quien intenta mostrar que el etnocentrismo es irrebasable, en la medida en que por “verdad”, sólo podemos entender la posibilidad de justificar nuestras convicciones ante un público. Dicho público es una determinada comunidad, que proporciona objetividad. Conducirse etnocéntricamente significa “dividir el género humano enaquellos ante los que podemos justificar nuestras convicciones y el resto. El primer grupo (ethnos) abarca a aquellos con los que podemos coincidir lo suficiente como para posibilitar una conversación fructífera” La tarea del fiolósofo consistiría en fomentar la solidaridad del ethnos más que en intentar una objetividad no humana.
En relación con los derechos humanos, renunciar a una realidad nohumana significa renunciar a algunos “consuelos metafísicos”. Principalmente a la idea de que “la pertenencia de nuestra especie biológica comporta ciertos derechos”, lo cual adquiere sentido “si a las semejanzas biológicas se une la posesión de algo no biológico, que liga nuestra especie con una realidad no humana y le presta con ello una dignidad moral”. Puesto que tal realidad no existe, elpragmatista ha de contentarse con la idea de que adscribir derechos a las personas no significa más que “que deberíamos tratarlas de una manera determinada. Sin embargo con ello no ofrecemos ninguna razón de por qué deberíamos tratarlas de esa manera”
Por su parte Vattimo afirma que el nihilismo es el único “fundamento” posible para defender el valor central del pensamiento emancipatorio moderno,...