Madurez Espiritual

EL MURO
Parábola Escrita por Gloria Evans.

NARRADORA: No recuerdo cuando empecé a construir mi Muro. Supongo que fue desde que estaba pequeña. Había muchos conflictos en mi familia y con frecuencia iba a mi cuarto a esconderme.

Cada vez habían más problemas:
- El Nuevo Bebe llegó a remplazarme.
- Nunca había suficiente dinero.
- Las peleas de mis padres cada vez eran másfrecuentes y fuertes.
- Mi Papá estaba bravo y distante, hasta que un día ... no volvió jamás.

Cada vez tenía más miedo. ¿En quién confiaría?, ¿Quién cuidaría de mi?.

Entonces, decidí construir un Muro. Me serviría como frontera y protección; algo especial solamente para mí. Estaba hecho de piedra natural que yo había encontrado en mi propia vida.

Me doy cuenta que al principio no era tangrande, pues cuando alguien me trataba bien yo le dejaba pasar. Pero los conflictos seguían. Mi Mamá alternaba entre la tristeza y los regaños. Tampoco era fácil el colegio para mi y empecé a esconderme detrás de una máscara y mi pequeña muralla.

(ALGUIEN PASA Y TROPIEZA CONTRA LAS PIEDRAS)

Algunas personas no notaban que tenía un Muro , chocaban contra él y caían.

Cuando alguien pasaba porencima de él, acercándose mucho a mí, francamente encontraba esto muy incomodo, así que decidí añadir otra fila de piedras al muro y ... bueno porque no unos cuantos vidriecitos. Así lo pensarían dos veces.

Me sentía tentada a quitar el Muro cada vez que se acercaba alguien que podría darme amor. Realmente lo necesitaba, pero un día alguien me hirió y lastimó profundamente. Yo pensé que podíaconfiar en él, que podía ser como el Papá que tanto necesitaba ... pero ... en vez de darme amor se aprovechó de mi.

Vi que no podía confiar en nadie y me sentí abandonada por Dios. Entonces decidí Construir mi Muro lo más alto posible.

A medida que avanzaba la construcción empecé a volverme más y más retraído y autosuficiente. Decidí decorar mi Muro y entonces pinté motivos en laspiedras, hice arcos y coloreé las ventanas de tal manera que deformaran la luz y nadie pudiera ver hacía dentro.
El Muro me gustaba tanto que un día yo deseaba mostrárselo a alguien para explicarle cómo había logrado cada diseño. Pero ya nadie paraba para hablar conmigo. Algunas de las personas que caminaban cerca no parecían darse cuenta de mí o de mi Muro. Otras se paraban y me miraban contristeza al observarme construir. Yo creía que estaban celosos de mi Muro y estaba resentida con ellas. Entonces decidí construir el Muro aún más alto.

Construía y construía frenéticamente hasta lograr lo que yo quería. Algunas piedras eran tan queridas para mí, que las brillaba cuidadosamente muchas veces al día.

Pero sorpresivamente, un día me di cuenta que el Muro era tan alto que ya no veíapasar a nadie, ni escuchaba a nadie. Todo estaba tan solitario, me sentí muy sola, entonces Grité:

MUJER CONSTRUCTORA: /// ¿Hay alguien ahí? ///.

NARRADORA: No hubo respuesta. Estaba tan oscuro dentro del muro y el aire era pesado y viciado. Me senté ahí por largo tiempo. Solo se podían escuchar los susurros de mis recuerdos. Deseaba que alguien viniera y me dijera que realmente le gustabami Muro, pero todo era solitario y callado, muy callado.

No sé cuanto tiempo estuve sentado a la sombra de mis recuerdos. Pero, de repente, al observar detenidamente mi Muro, me di cuenta que algunas piedras no encajaban tan bien como yo pensaba y el Muro se estaba resquebrajando. Vi grietas! Humedad! Moho! Y otras cosa más. ¡Esto ya era demasiado!. Había pensado que mi Muro era perfecto ,pero no lo era! Y por si fuera poco, un día alguien gritó desde el otro lado:

PERSONA MALSANA: ¡Hey! ¡Su Muro es feo, está torcido, es muy deforme!

NARRADORA: Me sentí totalmente derrotada y fracasada. Pero curiosamente, en ese mismo momento de más desespero alguien arrojó una flor sobre el Muro, esta cayó a mis pies.

Al verla, corrí hacia la pared para treparla de modo que pudiera...