Marx mill

Karl Marx fue un hombre que tuvo el valor de abrir la boca. El capitalismo de inicios del siglo XIX era un sistema de injusticia, inequidad, enfermedades, muerte y dolor, pero únicamente para losobreros. Estos, los mismos que habían sido los que con su trabajo enriquecieron a los capitalistas, eran los que sufrían todas las penurias de la época. Marx se levantó ante esto, y planteó una nuevafilosofía, un nuevo análisis que mostrara al mundo que esto era auténticamente una aberración. Pero Marx adoleció de algo, y fue exactamente lo mismo de lo que adolecieron los capitalistas de su época;estos últimos creyendo que todo se podía cuantificar, olvidándose de la existencia de los elementos subjetivos y, más importante aún, olvidándose de que afuera, en el mundo real, lejos de lascomodidades y envueltos en la miseria y el hambre, vivían otros seres humanos. Marx adoleció de lo mismo que estos capitalistas, una mente demasiado cerrada. Cegados ante lo que para ellos era la verdad, tantoMarx como los capitalistas no tomaron en cuenta factores como el territorio (entiéndase extensión y geografía), la población (número y constitución de ésta), las costumbres y hábitos, el pasadohistórico y las creencias religiosas que los habitantes poseen. Estos teóricos pensaron que era tan sencillo como llegar e imponer sus ideologías.
Para los utilitaristas, el mercado no podía tener igual enlo que poder y capacidad respecta, ignorando las penurias a las que someterían a gran parte de la población, y creyendo que sacrificar las vidas de algunos era una excusa válida, pues era unajustificación del “bienestar futuro”; nunca pensaron que tal vez la vida humana no es conmensurable. Marx también se cerró demasiado; Marx se dio cuenta de que el capitalismo de su época era un auténticofracaso, y tenía razón, pero nunca pensó que el capitalismo podría adoptar características socialistas, que es precisamente lo que hizo. Su mente cerrada por el odio y el desprecio a la injusticia que...