Mi alama se la dejo al diablo
INTRODUCCIÓN: «Mi alma se la dejo al diablo». Estas fueron las últimas palabras que Benjamín Cubillos, un campesino de 26 años que murió abandonadoen plena selva amazónica de Colombia, pudo escribir en su diario. El sabía que iba a morir.
Germán Castro Caycedo (1940) leyó el suceso en un periódico local y su alma de periodista vio «que allíhabía un reportaje», como él dice. Se propuso investigar los hechos y, así, escribir su cuarto libro al que tituló con las últimas palabras del diario, Mi alma se la dejo al diablo, editado porPlaneta.
El libro narra los últimos días de Benjamín Cubillos y de los trabajadores del campamento que Martin Morningstar, un piloto americano, montó en plena selva amazónica para organizar safaris. Elnegoció no funcionó, así que el piloto americano decidió desaparecer. Los cadáveres se encontraron muchos años después.
A partir de la publicación de los hechos, el autor se planteó rastrear lahistoria y durante cuatro años persiguió a los personajes que la protagonizaron. «Fue un trabajo muy arduo. El tiempo en la selva no pasa como en una ciudad. Para que se haga una idea, enviar un mensajede una aldea a otra que está a 300 kilómetros el mensajero puede tardar un año. La suerte que tuve fue encontrar tres diarios, dos de ellos con fechas, y así pude ordenar todo cronológicamente».Además de narrar unos hechos espeluznantes, el libro transmite toda la intimidad y la vida de un paraje lejano y desconocido como es la selva Amazónica.
Mi alma se la dejo al diablo fue escrito enColombia en 1984 y en suramérica ya se han publicado 30 ediciones. Germán Castro Caycedo parte de una realidad mágica para escribir un «reportaje largo» al más puro estilo periodístico.
A pesar dehaber escrito cuatro libros, el autor se considera un reportero, no un novelista. «Yo no me invento historias. ¿Para qué inventar cosas cuando la realidad siempre supera la ficción? Soy reportero y...
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