Moises Lira Serafin

ESPIRITUALIDAD DEL PADRE MOISÉS, UN APORTE A
NUESTRA CULTURA HIPERMODERNA

Ma. de la Luz Nava M., MCMI
El siervo de Dios, padre Moisés Lira Serafín, nació el 16 de septiembre de 1893, en Tlatempa, barrio de Zacatlán, Pue., en un singular, pero inadvertido rincón de la sierra norte de Puebla. Sus padres, Pedro Lira y Juliana Serafín, formaron una familia pobre y campirana, de la que fue elmás pequeño de 7 hijos.
Su infancia está marcada por el sufrimiento, ya que a la edad de 5 años muere su madre, y a los 15 años, con el segundo matrimonio de su padre, sufre la orfandad de su padre. Con la pérdida de sus progenitores, inició un camino de continuos desprendimientos que sin duda lo fueron disponiendo para asimilar y hacer vida la Espiritualidad de la Cruz.
Como Misionero delEspíritu Santo, Dios lo llamó a la primera hora, es decir, a iniciar una nueva congregación en la Iglesia, siendo por ello, el primogénito del padre Félix, de quien bebió el espíritu de las Obras de la Cruz. También en esta etapa de su vida afrontó situaciones difíciles, en las que le salió al encuentro la cruz: ante un apostolado fecundo al inicio de su vida sacerdotal, fue enviado a Roma, lasdiferencias en la relación con sus hermanos de comunidad, experimentó su fragilidad en la enfermedad, como fundador sufrió las discrepancias en la fundación de las Misioneras de la Caridad de María Inmaculada como fundador.
El siervo de Dios, vivió con autenticidad el espíritu de las obras de la Cruz, por el que hizo de su vida una alegre oblación al Padre en el amor, pureza y sacrificio. Inmerso enesta espiritualidad, Dios le concedió el carisma de la infancia espiritual, que lo introdujo en un proceso de cristoconformación filial, que fue dinamizando su vida por la encarnación de las virtudes de: humildad, sencillez, alegría, pureza, obediencia, confianza y abandono, que lo llevaron a ser con Jesús el hijo complaciente del Padre y de María Madre. Por la vivencia de esta virtudes realizóel lema de su vida «Hago siempre el agrado de mi Padre» (Jn 8, 29).
La Espiritualidad de la Cruz es una espiritualidad eminentemente sacerdotal, que implica ser para Dios, otro Jesús, sacerdote y víctima, viviendo en una continua ofrenda al Padre, haciendo siempre su voluntad . Es aquí, donde bien se engarza esta espiritualidad en la vida del padre Moisés, con el carisma que recibió: la infanciaespiritual. El siervo de Dios, vivió la experiencia sacerdotal con el tinte de la pequeñez espiritual, que lo llevó a ser con Jesús, el hijo complaciente del Padre.
Como pequeña Hostia debe ser el alma pequeña para inmolarse sin cesar para la gloria del Padre Celestial, con Jesús .
Vivió en continua ofrenda al Padre, haciendo del discernimiento una actitud de vida, que lo llevó a la obedienciafilial, hasta entregar a la voluntad del Padre, aquí se enmarca el aspecto dinámico de las virtudes teologales, por las que hace vida esta Espiritualidad de la Cruz .
El principio teológico que sustenta su experiencia filial se fundamenta efectivamente en esa experiencia, expuesta ya en la Escritura, donde los más pequeños son llamados por Jesús, para que aprendan de ellos: «les aseguro quesi no cambian y se hacen como los niños no entrarán en el reino de los cielos» (Mt 18, 3), pues «de los que son como ellos es el reino de los cielos» (Mt 19, 14).
El carisma de la infancia espiritual, colorido con que vivió la Espiritualidad de la Cruz encuentra eco en aquello que le dijo Jesús a Conchita:
En mí, me dijo, se puede nacer de cualquier edad, pero advierte, que siempre el alma quenazca en Mí debe ser niña: es decir, debe tener las cualidades de un niño, sin voluntad propia, sin arrogancia ni soberbia, siendo feliz de recibirlo todo, de arriba o de abajo; en conformarse ciegamente con todo, con el candor, la sencillez, la transparencia del alma de los niños.
El siervo de Dios, fue formado por el padre Félix desde estos criterios, pues le recomienda acreciente su amor...