Octubre Negro

OCTUBRE NEGRO
(2003)



LA PAZ - BOLIVIA
Una década después de la revuelta de octubre de 2003, los hechos continúan en la memoria colectiva y sus  consecuencias aún las vivimos hoy al haber significado el quiebre de un sistema político para abrir una nueva época, un nuevo proceso.
Sus protagonistas tienen visiones y posiciones distintas sobre lo que pasó y evalúan también de maneradiferente la situación actual de Bolivia, marcada por aquellos acontecimientos que  dejaron muchos muertos y heridos en un levantamiento popular que derivó en la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y posterior huida, el 17 de octubre de 2003.
Felipe Quispe, Mauricio Balcázar,  Carmen Ruiz, Carlos Sánchez Berzaín, Jaime Solares, David Vargas y Waldo Albarracín son algunos de los actoresque recuerdan, en esta edición especial de Los Tiempos, aquellos días de la Guerra del Gas, analizan los sucesos y se trasladan al presente para evaluar el cumplimiento de la “agenda de octubre”, la transformación del Estado y  el rol del Gobierno actual que cree haber consolidado los cambios demandados en esa ocasión.
Analistas examinan qué ocurrió con la agenda en cuanto a la exigencia de unamayor inclusión social en las estructuras del Estado, el cambio del sistema político, de las viejas prácticas y   si hoy la política hidrocarburífera responde a las propuestas respaldadas por la gente en el referendo sobre el gas de 2004.
Son diversas y contradictorias. La proximidad de las elecciones ha recrudecido la beligerancia verbal. Todos quieren llevar aguas a su molino. Con la media verdady la media mentira, héroes y antihéroes  se disputan desde ahora el voto del soberano.
En medio de ese fuego cruzado, éste aún no sabe a qué atenerse. Falta la perspectiva del tiempo para saber la verdad. Pero ahí están los testimonios que serán parte de ella.
El complot subversivo arrancó a principios de siglo. Los caciques del fundamentalismo indígena tenían su propia causa: querían sustituiral neoliberalismo por un régimen comunista, llámese socialismo o dictadura del proletariado. Solos, los de esta corriente, jamás pudieron ni acercarse a la conquista del poder. Por eso se apresuraron en subirse al carro del cocalero cuando éste logró cierto porcentaje en las elecciones del 2002.  Ya para entonces había la convicción de que la lucha armada no resulta. Ñankahuazú puso la lápida al“foquismo” cubano.
La otra fuerza que engrosó las filas de la conspiración salió del trópico. Los cocaleros se jugaron también en una carta su supervivencia. Coca o muerte podía ser su consigna. Sostenían una lucha sin cuartel con las fuerzas de la erradicación apoyadas por la DEA norteamericana. Éste es el origen del odio obsesivo hacia los EEUU. Después de expulsar a organismos de cooperación enel control del narcotráfico, ellos son ahora  juez y parte en esa tarea. Organizados en sindicatos, representan el núcleo de poder que gobierna desde el Chapare.
Éste es el subsuelo de donde emergió la fuerza belicosa que desembocó en el “octubre negro” de 2003. El gas fue un marbete utilizado para inflamar la reacción emocional de la poblada. El anti chilenismo es terreno abonado para ello. Laprueba de que no hubo nunca la “Guerra del Gas” es la estrecha relación de Morales con el Gobierno de Bachelet. En ese tiempo, se decía por medios oficiales que la negociación del gas por el mar no estaba descartada.
Recordemos que eran tiempos del deterioro del Estado, como efecto de los desaciertos del gobierno de Banzer-Tuto, quien propuso construir un gasoducto desde territorio boliviano hastael puerto de Mejillones en Chile, la ruta más directa al océano Pacífico. El resultado de los comicios mostró que la gente votó por Goni y Evo, primero y segundo, respectivamente.
Pero Evo nunca se resignó a perder, inmediatamente viajó a Perú y a donde pudo ir a denunciar a nivel internacional que hubo fraude. No quería, ni podía esperar 4 años de gobierno, como imponían las reglas en...